EL CAIRO, 6 May. (DPA/EP) -
El cineasta Shady Habash, muerto en prisión el pasado fin de semana, había ingerido alcohol antes de su muerte, según la versión de los hechos presentada a última hora del martes por la oficina del fiscal general, Hamada al Sawi.
Habash, de 22 años, falleció en la prisión de Torá, en El Cairo, tras más de dos años bajo custodia por haber dirigido un vídeo musical que se mofaba del presidente del país, Abdelfatá al Sisi, y criticaba si primer mandato de cuatro años.
En su comunicado, la oficina del fiscal ha indicado que el 1 de mayo recibió un informe de la muerte de Habash en la clínica de la prisión. Los fiscales inicialmente examinaron el cuerpo y no encontraron ningún signo de lesiones. Un médico de la prisión les contó que el día de su muerte, Habash había estado enfermo y presentaba dolor de estómago y vómitos, según el texto.
El doctor indicó que Habash había bebido algo de alcohol por error, pensando que era agua, un día antes, y se le suministró una inyección contra los vómitos, antes de enviarle de vuelta a su celda. Según el médico, citado en el comunicado oficial, esa misma noche el estado de Habash empeoró y los intentos de reanimarle fracasaron.
La Fiscalía ha indicado que se interrogó a tres de los compañeros de celda de Habash. Uno de ellos testificó que un día antes de morir Habash reía de forma incontrolable. El cineasta dijo que había bebido de forma accidental un sorbo de alcohol que había para desinfectar las manos de los prisioneros como medida de precaución contra el coronavirus, según el recluso.
Este añadió que encontró dos contenedores de alcohol vacíos de otro tipo al usado en prisión en la papelera. Otros dos prisioneros confirmaron el relato, según la Fiscalía. El fiscal general ha ordenado que la investigación sea completada y se practique una autopsia el cuerpo, según el comunicado.
Entretanto, los grupos de defensa de los Derechos Humanos han expresado sus dudas. La Red Árabe para la Información sobre Derechos Humanos ha sostenido que Habash murió por "negligencia y falta de justicia". El abogado Jaled Alí ha subrayado que Habash debería haber sido liberado hace dos meses ya que había cumplido el periodo máximo de detención provisional, de dos años.