BOGOTÁ, 9 Oct. (Notimérica)-
El Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha asegurado a través de un comunicado que la masacre en el municipio colombiano de Tumaco, que dejó seis muertos y más de 30 heridos, "es una grave afrenta al cese al fuego acordado con el Gobierno".
Del mismo modo, la guerrilla solicitó al Mecanismo de Verificación (conformado por la Organizaciones de las Naciones Unidas, la Iglesia Católica y ambas partes) que actúe en esta situación.
Según el ELN, "esta tragedia continúa demostrando como las armas del Estado, siguen colocándose al servicio de las políticas del Estado y las clases dominantes". Los miembros del comando central también aseguraron que la masacre "es una contradicción a los propósitos de paz" y que mientras se siga "empleando la violencia para perpetuarse en el poder, no será posible avanzar hacia una nueva realidad en el país y por tanto hacia la solución política", han indicado en el comunicado.
Este domingo se ha hecho público el primer informe de la Defensoría del Pueblo en la que se ha señalado a la Policía Antinarcóticos como posible responsable en el ataque a los campesinos que protestaban contra la erradicación forzosa de cultivos de uso ilícito en Tumaco.
El informe de la Defensoría también ha desmentido la versión oficial de las autoridades, en la que señalan que los disparos se presentaron después de que un grupo armado ilegal lanzara explosivos contra la Policía y el Ejército. "No se observó a simple vista ninguna evidencia de los efectos que genera la onda expansiva resultado de la activación de cilindros bomba", señala el documento según ha informado 'El Espectador'.