Actualizado 11/07/2009 02:50

ENTREVISTA-Pfizer comienza trabajo sobre fármacos para autismo

Por Toni Clarke

BOSTON (Reuters/EP) - Pfizer Inc, el mayor laboratorio del mundo, comenzó a trabajar en tratamientos contra el autismo, dijo el viernes el jefe de investigación y desarrollo de la compañía.

La empresa formó un nuevo grupo de estudio de 14 miembros llamado Unidad de Desórdenes del Espectro Autista, con sede en Groton, Connecticut.

"Siempre hemos estado interesados en esta área, pero no teníamos los blancos", indicó durante una entrevista Martin Mackay, presidente de investigación global y desarrollo de Pfizer. "Ahora los tenemos", agregó.

Los blancos farmacológicos suelen ser proteínas relacionadas con una enfermedad y si bien Mackay se negó a identificar los blancos por razones competitivas, el experto manifestó que aún se encuentran en un estadio muy temprano.

El autismo habitualmente se diagnostica en la niñez y se caracteriza por problemas en la interacción social y la comunicación y una tendencia a intereses o conductas inusuales.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, el autismo es la segunda causa de discapacidad en el desarrollo después del retraso mental. Estudios demostraron que afecta a entre dos y siete de cada 1.000 niños.

La unidad, que fue creada en enero por tres empleados de Pfizer que tenían relación personal con la condición, es parte de la división de neurociencia del laboratorio.

La neurociencia, y particularmente la enfermedad de Alzheimer, se ha vuelto una zona importante de interés para Pfizer, que pactó la adquisición de Wyeth por unos 68.000 millones de dólares.

Si se completa, esa operación le dará a Pfizer una participación en bapineuzumab, alguna vez considerada la medicina en desarrollo más prometedora contra el Alzheimer.

"Cuando decidimos que la enfermedad de Alzheimer era un área en la que teníamos que golpear fuerte, decidimos que no podíamos crecer orgánicamente por lo que tuvimos que realizar adquisiciones", señaló Mackay.

Con todo, cierta decepción llegó cuando un ensayo de estadio intermedio demostró que si bien ayudaba a algunos pacientes con cierto perfil genético, bapineuzumab aumentaba el riesgo potencial de efectos colaterales graves en el cerebro.

Mackay reconoció que algunos se sintieron decepcionados con el fármaco, pero indicó que él aprendió a no emocionarse o decepcionarse por un producto experimental hasta que los resultados no son concluyentes.

A comienzo de mes, Johnson & Johnson acordó pagar 1.000 millones de dólares por un 18,4 por ciento de participación en Elan Corp Plc, que está desarrollando bapineuzumab con Wyeth.