WASHINGTON, 27 Jun. (Notimérica) -
La lengua española fue una de las sorpresas que la pasada noche marcó el primer debate entre los candidatos demócratas para las elecciones presidenciales de 2020. Algunos de los 10 aspirantes a sacar a los republicanos de la Casa Blanca y derrotar a Donald Trump --de los 24 precandidatos totales-- utilizaron este recurso lingüístico en varias ocasiones, ¿por qué? ¿cuál es la estrategia?
Fue el excongresista Beto O'Rourke, uno de los precandidatos que más suena a día de hoy entre las apuestas demócratas, quien inició una ronda de respuestas en español, respondiendo en este idioma a una cuestión sobre las tasas impositivas. O'Rourke demostró fluidez en el idioma, lo que por un momento lo convirtió en el protagonista de la noche.
Sin embargo, sus contrincantes trataron rápidamente de ponerse a su altura. El senador Cory Booker y el exsecretario de Vivienda y Desarrollo Urbano Julián Castro no tardaron en intervenir y en participar en la iniciativa de su rival, aunque este último tan solo dijo su nombre y su candidatura en español.
Los aspirantes a la contienda ya habían reiterado en anteriores ocasiones la importacia de la participación de la comunidad latina en las elecciones. Aunque esta demostración de sus habilidades lingüísticas podría ser la materialización más directa del llamamiento al voto de los hispanos residentes en el país estadounidense.
De acuerdo con datos del Censo recogidos por la Encuesta sobre comunidad, el 21,3 por ciento de los residentes en Estados Unidos no utiliza el inglés como lengua para comunicarse en su hogar. En concreto, un 13,2 por ciento de las personas hablan español en el ámbito familiar.
Los anteriores datos es un promedio del país, ya que en algunos estados este porcentaje es considerablemente más elevado. En concreto, en California, donde el 28,7 por ciento utiliza la lengua hispana en casa.
La cuestión migratoria y, en especial, la imagen de los cadáveres del salvadoreño Óscar Martínez junto a su hija Valeria en el río Bravo, marcaron este primer debate de precandidatos demócratas a la Presidencia. Los 10 postulantes utilizaron la crisis migratoria para marcar sus diferencias y matices ideológicos.
En este sentido, se observó que los aspirantes tienen muy presente a la numerosa población inmigrante que reside en el país y que podrían definir al candidato definitivo. Por ello, parece que los tres candidatos que se han atrevido a defender sus respuestas en español, o al menos intentarlo, podrían haber obtenido una situación ventajosa.
Sin duda estas intervenciones se han hecho eco a nivel internacional. Tal es así que la candidata demócrata Marianne Williamson, quien participará este jueves en el debate, ha publicado en su cuenta de Twitter: "Necesito aprender español para mañana a las 9".