Publicado 20/02/2021 13:30

Europa.- El 'Aita Mari' está a la espera de asignación de puerto seguro tras el rescate de 102 migrantes

Archivo - Barco de rescate 'Aita Mari'
Archivo - Barco de rescate 'Aita Mari' - SALVAMENTO MARÍTIMO HUMANITARIO - Archivo

MADRID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El buque de rescate 'Aita Mari' de la ONG Salvamento Marítimo Humanitario ha solicitado la asignación de un puerto seguro para el desembarco de 102 migrantes rescatados en el Mediterráneo Central.

"Tras las dos operaciones de auxilio de ayer en alta mar, hemos solicitado un lugar seguro para desembarcar a las 102 personas rescatadas", ha informado la ONG en un comunicado. El buque ha pedido amparo a Italia y Malta, pero éste último ya ha rechazado abrir su puerto.

El viernes el 'Aita Mari' localizó dos embarcaciones en el Mediterráneo Central, a unos 180 kilómetros de Libia y a 100 kilómetros de Lampedusa. Los migrantes de la primera, con 102 personas a bordo, fueron embarcados. Frente a la segundo, ante la imposibilidad de superar la capacidad certificada por la autoridad marítima española del buque, 124 personas incluida la tripulación, se pidió ayuda a Italia y Malta.

Mientras se esperaba respuesta, la tripulación del 'Aita Mari' garantiza la seguridad de sus pasajeros. Para ello, repartió chalecos salvavidas, víveres y agua. Tras ello, y a la espera de respuesta de las autoridades competentes, estas 46 personas decidieron continuar la navegación hacia Lampedusa.

Entre las 102 personas rescatadas hay 94 varones, 57 de ellos menores de edad. Hasta 18 tienen menos de 16 años y 39, entre 16 y 18. Además hay siete mujeres, dos de ellas embarazadas, de 17 y 50 años, y una niña de 9 meses.

La ONG ha indicado que los náufragos "se encuentran muy débiles". "Se les repartió ropa seca, mantas y comida para que se recuperaran de la travesía. Un chico tuvo que quedarse en observación en la clínica porque presentaba síntomas de hipotermia y posible intoxicación por inhalación de vapores del combustible", ha indicado la tripulación.

"Creemos que viajaba al fondo de la embarcación y, de haber continuado el viaje en esas circunstancias, es altamente probable que hubiera fallecido ahogado. El resto de compañeros de viaje presentan signos de tortura: disparos en los pies, quemaduras con agua hirviendo y fracturas", ha añadido.

"SMH aprovecha esta ocasión para reclamar que Europa se involucre en el salvamento de las personas que migran a través del mar. Esta actividad no puede recaer en mano de un puñado de ONG y de la sociedad civil. Además, queda demostrado que la única vía política de enfrentar esta grave y recurrente crisis es crear vías legales para la migración y corredores humanitarios", ha planteado la ONG en el comunicado.