Por Joseph Guyler Delva
GONAIVES, Haití (Reuters/EP) - El ex presidente de Estados Unidos Bill Clinton visitó el martes las calles de la ciudad haitiana de Gonaives, en su primer viaje como enviado especial de Naciones Unidas al empobrecido país caribeño.
Durante un recorrido en el que fue acompañado por el presidente haitiano, René Preval, Clinton dijo que su prioridad era organizar los compromisos de los países donantes para construir caminos, mejorar los sistemas de educación y de salud y ayudar al Gobierno a crear 150.000 a 200.000 empleos dentro de dos años.
"Mi trabajo es intentar organizar este proceso y acelerarlo", dijo Clinton, quien fue designado en mayo por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Haití es el país más pobre de la Américas y muchos de sus 9 millones de habitantes viven con menos de 2 dólares al día.
Disturbios por el aumento descontrolado de los precios de los alimentos llevaron al derrocamiento del Gobierno el año pasado, seguidos por el paso de cuatro huracanes y tormentas tropicales que devastaron cosechas, destruyeron puentes e inundaron ciudades litorales.
Haití, azotada por la violencia política y dictaduras durante gran parte de su historia, consiguió un alivio de deuda por 1.200 millones de dólares del Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y otros acreedores este mes, liberando hasta un estimado 50 millones de dólares al año para invertir en otros proyectos.
En abril, los donantes prometieron 324 millones de dólares en un período de dos años para reconstruir Haití. El Banco Interamericano de Desarrollo dijo en junio que brindaría 120 millones de dólares en subvenciones el próximo año para mejorar la infraestructura, los servicios básico y la prevención de desastres.
Clinton visitó un hospital provisorio para víctimas de las inundaciones y saludó a los haitianos en Gonaives, donde los caminos enlodados aún muestran las marcas de las inundaciones que dejaron a cientos de personas el año pasado.
"Me voy a reunir con donantes y otros para asegurarme de que creemos oportunidades y empleos para los haitianos", afirmó.
Preval decidió espontáneamente llevar a Clinton por un desvío hasta un lugar de construcción donde trabajadores usaban bulldozers para retirar escombros desde canales secos e intentaban dragar el Río La Quinte.
"Bill, ven", gritó Preval mientras se sentaba detrás del volante de un automóvil para llevar a Clinton hasta el lugar en persona.
Clinton también visitó una planta de procesamiento de mango y una fábrica que transforma la basura en combustible para cocinar en una barriada de la capital.
"El presidente Clinton ha estado interesado en Haití por un largo tiempo (...) él está dando a Haití una mano al conseguir que los inversores y otros países involucrados inviertan y creen empleos", declaró Preval.