Actualizado 31/07/2009 18:10

Expertos EEUU buscan respaldar seguridad de vacuna H1N1

Por Maggie Fox

WASHINGTON (Reuters/EP) - Cuando los asesores de la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) se reunieron la semana pasada para debatir sobre una nueva vacuna contra la gripe pandémica H1N1, algunos de los mayores críticos de las inmunizaciones estuvieron presentes.

Lo mismo sucedió el miércoles, cuando un grupo de asesores decidió quiénes serán los primeros en recibir la vacuna, que los laboratorios se están apurando por fabricar, evaluar y distribuir en pocas semanas.

La enfermera registrada Vicky Debold, del consejo del Centro Nacional de Información sobre Vacunas, que cuestiona la seguridad de la vacuna, también es miembro del Comité Asesor de la FDA sobre Vacunas y Productos Biológicos Relacionados. La fundadora del grupo, Barbara Loe Fisher, realizó extensas preguntas durante el encuentro de asesores.

Lyn Redwood, presidenta de SafeMinds, una entidad que defiende la existencia de una posible relación entre el mercurio y los desórdenes neurológicos, realizó preguntas en la reunión del miércoles entre asesores en vacunas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).

El Gobierno federal de Estados Unidos está más preparado que nunca para los cuestionamientos, las críticas y los temores sobre las vacunas, debido a una preparación de más de 30 años en el tema.

"Sabemos que hay algunas personas que son reticentes a las vacunas y que han oído información que las preocupa", dijo el miércoles a periodistas la doctora Anne Schuchat, de los CDC.

Pero, ¿cuáles son las mayores preocupaciones?:

* ¿Una vacuna contra un virus como el H1N1 causará más reacciones adversas que la inmunización contra la gripe estacional?

* ¿Los aditivos especiales llamados adyuvantes causarán reacciones?

* ¿Las vacunas contendrán "timerosal", un conservante en base a mercurio que los críticos aseguran que podría causar problemas?

* ¿Es peligroso vacunar contra la gripe estacional y la H1N1 al mismo tiempo?

RAPIDA EXPANSION

La influenza H1N1, popularmente conocida como gripe porcina, dio la vuelta al mundo en semanas, al infectar a millones de personas y causar la muerte de más de 800 según los conteos oficiales, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) aconsejó detener por la rápida expansión de la enfermedad.

Aunque se trata sólo de una pandemia "moderada" según los estándares de la OMS, podría empeorar a medida que las temperaturas frías lleguen al hemisferio norte, dado que en esa condición es donde mejor prosperan los virus.

Cinco empresas están desarrollando vacunas contra la influenza H1N1 para el mercado estadounidense: la unidad MedImmune de AstraZeneca, la australiana CSL Ltd, GlaxoSmithKline Plc, Novartis AG y Sanofi-Aventis SA.

Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos comienzan los ensayos de las inmunizaciones el mes que viene. Compararán vacunas con y sin adyuvantes, que son ingredientes que mejoran la respuesta inmune a una vacuna.

Los adyuvantes se usan en las vacunas contra la gripe en Europa pero no en Estados Unidos y aunque quizá en este caso haya una autorización bajo emergencia, los funcionarios prefieren emplear las vacunas sin adyuvantes por ahora.

Firmas como Glaxo aseguran que estarán listas para empezar a vacunar a las personas en Europa ni bien surjan los primeros datos de esos ensayos, a fines de septiembre. Algunos han cuestionado esta velocidad.

Por su parte, el doctor Hector Izurieta, de la FDA, dijo que la agencia había establecido una red excepcionalmente extensa para lo que se llama vigilancia poscomercialización.

"Si sucede algo después de la inmunización, la vacuna será acusada", dijo Izurieta en un encuentro la semana pasada. "Habrá muchos, muchos informes de las cosas que podrían estar, o no, asociadas con la vacunación", añadió.

Los reguladores de vacunas y los expertos en salud pública lamentablemente saben lo que sucedió con la última campaña de inmunización contra la gripe porcina.

En 1976, el Gobierno estadounidense realizó precipitadamente una vacunación masiva contra un virus de influenza porcina que nunca se expandió fuera de ninguna base militar.

Luego de ello, se reportaron varios casos de una rara enfermedad neurológica paralizante llamada síndrome de Guillain-Barre y, pese a que nunca se halló una relación clara con la vacuna, el incidente volvió a muchas personas reticentes a las inmunizaciones.

Más recientemente, los temores se centraron en el timerosal, quitado de la mayoría de las vacunas después de que activistas denunciaron que podía causar autismo, un vínculo desacreditado por muchos estudios científicos pero que algunos aún sostienen que es verdadero.

En lugar de combatir esa percepción, Schuchat dijo que los CDC lidiarán con ella. "Habrá fórmulas libres de timerosal disponibles para aquellas personas que estén interesadas en ese tipo de preparación", señaló la funcionaria.