Actualizado 17/08/2009 19:02

Fallas técnicas y humanas influyeron accidente Spanair: informe

MADRID (Reuters/EP) - Una configuración inadecuada para el despegue, la comprobación errónea de los pilotos y la falta de funcionamiento del sistema de alerta influyeron en el accidente del avión de la aerolínea española Spanair hace un año en el que murieron 154 personas, según un informe oficial.

La Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC), dependiente del Ministerio de Fomento, publicó el lunes un informe a tres días del primer aniversario del accidente, que tuvo lugar el 20 de agosto del 2008 en el aeropuerto madrileño de Barajas.

En él se señala que la maniobra de despegue se realizó con los "flaps" y los "slats" replegados, "lo que constituiría una configuración inapropiada para esa fase del vuelo".

Estos dispositivos, unas superficies móviles en las alas del avión que permiten que se sostenga a velocidad reducida, se despliegan al despegar y al aterrizar, y en vuelo permanecen replegados.

"El operador contaba con procedimientos estándar y listas de comprobación en vigor (...) en los que se incluía la selección y confirmación de la configuración adecuada para el despegue", detalló el informe.

"Los pilotos usaron estos procedimientos como referencia, pero por factores como pudieron ser la interrupción que supuso la vuelta al estacionamiento de la aeronave por una avería, la presión por el retraso sobre el horario programado o deficiencias en los métodos de trabajo empleados en cabina, no se llegaron a cumplir estrictamente", añadió.

Además, el sistema encargado de advertir a la tripulación de que había una configuración inadecuada para el despegue (TOWS, por sus siglas en inglés) no funcionó, indicó el informe.

El MD-82 de Spanair había llegado a Madrid procedente de Barcelona en un vuelo sin incidencias.

Una vez en pista para otro vuelo con destino a Las Palmas de Gran Canaria, la tripulación detectó un excesivo calentamiento de la sonda de temperatura, por lo que volvió al aparcamiento y los mecánicos lo modificaron.

El avión despegó finalmente del aeropuerto madrileño con 172 personas a bordo, pero tras levantarse apenas unos 30 metros se estrelló en un barranco en el lateral de la pista.

Los seis integrantes de la tripulación fallecieron, así como 147 pasajeros, mientras que 19 resultaron heridos graves. Uno de ellos falleció posteriormente.

La investigación continúa abierta.

REUTERS TL MAG