MADRID, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Filipinas está contemplando la posibilidad de prolongar el estado de emergencia en la provincia de Mindanao, que en principio iba a terminar a principios de año, dada la persistencia del "problema de la insurgencia comunista" en esta región del sur del país, según ha declarado este viernes el portavoz de Presidencia, Salvador Panelo.
"La amenaza terrorista es un factor a la hora de preservar el estado de emergencia por culpa de la violencia sin ley que existe en Mindanao", ha declarado Panelo.
El estado de emergencia fue declarado por vez primera el 23 de mayo de 2017 después de que el grupo armado Maute, vinculado con la organización terrorista Estado Islámico, asaltara la ciudad de Maraui. Desde entonces, la imposición de la autoridad militar sobre la provincia se ha prolongado hasta en tres ocasiones, una situación que han denunciado tanto grupos pro Derechos Humanos como activistas sociales por los presuntos abusos cometidos por los militares.
En los días previos al levantamiento de la ley marcial, el Gobierno intentó reabrir formalmente las conversaciones de paz con la insurgencia comunista en la provincia hasta el punto de que ambas partes llegaron a declarar una tregua navideña.
Sin embargo, la Presidencia filipina ha considerado que la situación no ha mejorado como para restaurar la situación de normalidad por lo que la ley marcial proseguirá "mientras el presidente (Rodrigo Duterte) lo considere necesario para evitar o reprimir cualquier acto de violencia o rebelión", ha añadido el portavoz en declaraciones recogidas por ABS-CBN.