Publicado 12/06/2016 02:55

La Fiscalía de Guatemala acusa a 5 ministros de Pérez Molina de red de regalos millonarios

Otto Pérez Molina
JORGE LOPEZ / REUTERS

CIUDAD DE GUATEMALA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

La fiscal general de Guatemala, Thelma Aldana, ha presentado este sábado cargos de corrupción contra cinco exministros durante el mandato de Otto Pérez Molina, expresidente enjuiciado y arrestado el año pasado por un supuesta corrupción. Los ministros estarían supuestamente involucrados en una serie de regalos al presidente entre los que se incluiría un helicóptero, una vivienda en la playa y una lancha a motor.

Aldana ha detallado aspectos del caso conocido como "la cooperacha" por el cual Pérez Molina y su vicepresidenta, Roxana Baldetti, recibían regalos de lujo por parte de los ministros más cercanos.

Los obsequios a Pérez Molina incluyen un helicóptero valorado en 3,5 millones de dólares, una lancha lujosa de 260.000 dólares y una casa en la playa de un millón de dólares. El total de estos y otros regalos para el exmandatario alcanza los 33 millones de quetzales guatemaltecos, más de 4,3 millones de dólares.

Este sábado, la Policía ha detenido a dos de los cinco exministros, el exministro de Defefensa, Manuel López Ambrosio, y el exministro de Interior, Mauricio López Bonilla.

El exministro de Infraestructura, Alejandro Sinibaldi, el exministro de Energía, Erick Archila y el también exministro de Defensa, Ulises Anzuelo, han sido señalados por la Fiscalía.

Los funcionarios públicos que participaron repetidamente en la compra y entrega de estos suntuosos bienes tenían por intención "agradar al jefe", al estilo de las estructuras de delincuencia organizada que garantizan su permanencia dentro de la jerarquía y su permiso de operación mediante el otorgamiento de dádivas al jefe de la organización, ha señalado en un comunicado la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).

Según la Fiscalía, se realizaba una especie de "cooperacha" (cooperativa) de dinero en efectivo, el cual era recaudado por Juan Carlos Monzón, secretario privado de la entonces vicepresidenta Baldetti, quien decidía el regalo.