Actualizado 05/06/2007 14:39

Francia/Colombia.- Sarkozy confirma que la liberación de Rodrigo Granda responde a una "petición expresa" suya a Uribe


PARÍS, 5 Jun. (del corresponsal de EUROPA PRESS, Salvador Martínez) -

El presidente francés Nicolas Sarkozy, calificó hoy de "decisión muy importante y valiente" la liberación incondicional del 'canciller' de las las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Granda, ordenada ayer por el presidente colombiano, Álvaro Uribe, y confirmó que esta liberación responde a una "petición expresa" del jefe de Estado galo.

Sarkozy, "tras la liberación de Granda, espera que las FARC respondan" al gesto de su homólogo colombiano, según se lee en un comunicado emitido por el palacio del Elíseo.

Ese texto indica que la liberación del 'canciller' de las FARC satisface una petición que Sarkozy formuló expresamente al presidente colombiano "en el marco de sus esfuerzos destinados a la liberación de los secuestrados" por las FARC, en general, y muy especialmente, la de Ingrid Betancourt, la candidata a la elección presidencial colombiana secuestrada el 23 de febrero de 2002 por las fuerzas revolucionarias colombianas.

Esta mañana, Nicolas Sarkozy se reunió con los familiares de Ingrid Betancourt. Su hija Mélanie señaló a la salida de su segundo encuentro en tres semanas con el jefe de Estado francés que "la voluntad política del presidente Sarkozy" es lo que hace que "la situación avance".

Prueba de esa voluntad política es que Sarkozy haya afirmado a los integrantes de la familia Betancourt que llevará el asunto de los secuestrados por las FARC a la reunión del G8, que tendrá a partir de mañana en la estación balnearia de Heiligendamm, en el noreste de Alemania.

Por su parte, el marido de Betancourt, Juan Carlos Lecompte, señaló que "Sarkozy quiere que nuestra compatriota vuelva después de cinco años y medio de secuestro". Que Sarkozy lleve a la reunión del G8 el caso de Ingrid y de los secuestrados demuestra la "fuerte determinación" del presidente francés de poner una solución al "problema colombiano", según los términos de Lecompte.