Actualizado 25/08/2009 02:23

Funcionarios Nueva Jersey advierten a Gaddafi mantenerse alejado

Por Claudia Parsons

NUEVA YORK (Reuters/EP) - La posibilidad de que el gobernante de Libia, Muammar Gaddafi, pueda establecerse en la ciudad estadounidense de Englewood, en Nueva Jersey, mientras asiste a la Asamblea General de Naciones Unidas el próximo mes, escandalizó a funcionarios locales el lunes.

El alcalde de Englewood, Michael Wildes, señaló que sería ofensivo incluso que a Gaddafi se le otorgue una visa para entrar a Estados Unidos luego que el condenado por el asalto de Lockerbie, Abdel Basset al-Megrahi, tuviera una "bienvenida de héroe" en su regreso a Libia la semana pasada.

Megrahi fue exonerado de la cadena perpetua que cumplía en una prisión escocesa por razones humanitarias, debido a que padece de cáncer terminal.

Un funcionario de la misión libia para Naciones Unidas confirmó que Gaddafi planea asistir a la Asamblea General en las dependencias de la ONU en Nueva York, pero dijo que no había información sobre el lugar elegido para su estadía. Gaddafi debería dirigirse a la Asamblea el 23 de septiembre.

Wildes señaló que la embajada libia posee una propiedad de 1,8 hectáreas ( 4.5 acres) en Englewood, que colinda con una escuela judía.

"La gente está furiosa de que un financista del terrorismo, que en los últimos días dio una bienvenida de héroe a un convicto por terrorismo, sea acogido en nuestro suelo, por no hablar de residir en nuestra ciudad", dijo Wildes a Reuters.

Familiares de las víctimas estadounidenses han condenado fuertemente al Gobierno escocés por su decisión de liberar a Megrahi, de 57 años, la única persona convicta por el atentado al vuelo de Pan Am sobre la localidad escocesa de Lockerbie en 1988, donde murieron 270 personas.

"Gaddafi puede estar seguro de que aquí no es bienvenido", señaló el senador de Nueva Jersey Frank Lautenberg, en un comunicado.

SIN DECISION AUN

Un paria de la comunidad internacional de larga data, Gaddafi mejoró sus relaciones con los gobiernos occidentales durante los últimos años desde que abandonó su búsqueda de armas nucleares y acordó aceptar la responsabilidad por el atentado de Lockerbie.

El líder de Libia, miembro de la OPEP, es conocido por establecer campamentos beduinos durante sus viajes al extranjero.

El portavoz del Departamento de Estado, Ian Kelly, declaró que Washington estaba en discusiones con funcionarios de Naciones Unidas y autoridades de Nueva York para cumplir con sus obligaciones durante las visitas de jefes de Estado.

"No se han tomado decisiones sobre dónde hará su tienda nadie", señaló Kelly a la prensa.

Consultado sobre si era apropiado que Gaddafi se quedara en un área habitada por algunos familiares de víctimas del atentado, Kelly declaró: "Pediría a cualquier (...) líder extranjero ser cuidadoso con las preocupaciones de las víctimas del más horrible ataque terrorista que afectó a ciudadanos estadounidenses antes del 11 de septiembre".

Wildes, un abogado de inmigración y ex fiscal federal, aseveró que a Gaddafi se le debería negar la visa estadounidense.

La Asamblea General de la ONU frecuentemente es una oportunidad para llevar críticas contra Estados Unidos, que no tiene más remedio que permitir la asistencia de los jefes de Estado.

Entre aquellos cuyas visitas han enfurecido a los estadounidenses en los últimos años están el presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, el mandatario, venezolano Hugo Chávez, y el ex líder cubano Fidel Castro.