MADRID (Reuters/EP) - La oferta récord de 80 millones de libras esterlinas (131 millones de dólares) que hizo el Real Madrid por el futbolista portugués Cristiano Ronaldo pasó el martes de ser un tema deportivo a colmar la escena política española.
Los diputados españoles abrieron una discusión en el Congreso sobre la elevada suma de la transferencia en plena crisis económica, mientras que la ministra de Economía, Elena Salgado, dijo que era un tema privado del club.
La formación catalana ICV (Iniciativa per Catalunya Verds), con el apoyo de otros grupos parlamentarios, hizo una proposición al Gobierno español para que emprenda una iniciativa a nivel europeo que limite las retribuciones a los deportistas profesionales.
El portavoz de ICV en el Congreso, Joan Herrera, presentó también por escrito preguntas relacionadas a cómo planea el Gobierno garantizar que los clubes "sufraguen las deudas pendientes" con Hacienda y con la seguridad social antes de realizar el mayor desembolso económico de la historia del fútbol por un jugador.
Sin embargo, el gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) consideró que la propuesta del ICV mezcla la gestión pública con la gestión privada.
"Siempre y cuando respeten el marco legal, es una cuestión privada. Nosotros nos ocupamos de la gestión del bien público", dijo el portavoz socialista José Antonio Alonso.
La ministra de Economía coincidió en que el tema es una cuestión privada del equipo blanco.
En una entrevista con la televisión estatal, Salgado dijo que estaba "sorprendida pero no escandalizada" por la oferta del Real y exhortó a los bancos que financiaron la operación a que sean igualmente generosos con firmas y familias.
"El Real Madrid es una empresa privada y toma sus decisiones como le parece oportuno y los bancos también toman sus decisiones. No hay nada ilegal en esta decisión", dijo la ministra.
"Si hay liquidez para dar dinero al Real Madrid, debe concederse a familias y empresas. Les pediría (a los bancos) que hagan un esfuerzo también por ellos", añadió la funcionaria.
Antes de ofertar por Ronaldo, el nuevo presidente del Madrid, Florentino Pérez, había gastado ya unos 94 millones de dólares por el brasileño Kaká y el club de la primera división española dijo que quiere a cuatro o cinco jugadores más de primer nivel para que ayuden a reconstruir al equipo.
SORPRESA POR CIFRA
El exorbitante monto impresionó a muchos españoles, ya que el país se encuentra en medio de una profunda recesión, con el desempleo acercándose al 20 por ciento y muchos clubes de fútbol ya con números rojos en sus cuentas.
El propio delantero portugués, de 24 años, calificó de "histórico" el acuerdo entre el Real Madrid y su equipo de procedencia, el Manchester United.
El presidente de la UEFA, Michel Platini, describió la cifra como "excesiva", en momentos cuando el mundo está en plena crisis financiera.
En noviembre, los ministros de Deportes de la UE sopesaron la posibilidad de un regulador financiero paneuropeo para el deporte, pero en su lugar decidieron presionar a los organismos de gobierno del fútbol, la FIFA y la UEFA, para que introduzcan normas más estrictas para clubes y ligas.
Funcionarios de la UEFA dijeron que esperaban sacar adelante esos planes este año para ajustar las regulaciones financieras, recortar la excesiva deuda de los clubes e imponer normas más estrictas para las transferencias de los jugadores.
El martes, el director general del Real Madrid, Jorge Valdano, dijo que si el club quería competir con ricos rivales europeos como el AC Milan de Silvio Berlusconi o el Chelsea inglés de Roman Abramovich debía comprar jugadores de primer nivel.
"Si un club quiere cometer suicidio pagando 100 millones de euros por un jugador, ese es su problema", dijo Celia Villalobos, una legisladora conservadora del parlamento español.
(Información de Edgar Aribau e Ian Rogers; Edición de Raquel Castillo; Redacción de Madrid y de Silene Ramírez y Patricia Avila en Santiago de Chile)