Por Nicolás Misculin
BUENOS AIRES (Reuters/EP) - El oficialismo perdía el lunes en los mayores distritos de Argentina, en un duro revés sufrido en las elecciones legislativas de mitad de mandato, que alcanzó hasta la provincia natal de Néstor Kirchner, líder del peronismo gobernante.
La presidenta Cristina Fernández -esposa del ex mandatario Kirchner- cederá el control parlamentario que mantenía hasta el domingo, lo que podría trabar su capacidad de acción y acabar con las aspiraciones del matrimonio de seguir en el poder tras las elecciones presidenciales del 2011.
En la madrugada del lunes, los candidatos opositores lograban imponerse en los mayores cinco distritos del país medidos por población y peso económico.
Con el 72,8 por ciento de las mesas contadas en la provincia de Buenos Aires, donde vive uno de cada cuatro argentinos, Kirchner lograba el segundo lugar con el 32,3 por ciento de los votos, detrás del empresario Francisco de Narváez -de una rama disidente del gobernante peronismo-, con un 34,56 por ciento.
El Gobierno cayó inclusive en la provincia patagónica de Santa Cruz, cuna política del matrimonio Kirchner, donde el candidato oficialista a diputado era derrotado por un reducido margen, con el 99,55 por ciento de los votos medidos.
En la ciudad de Buenos Aires, donde muy pocas veces el peronismo logró imponerse, la opositora Gabriela Michetti -aliada de De Narváez en la capital argentina- derrotó con claridad al postulante a diputado oficial, que también fue superado por otros dos candidatos opositores.
Con todos los sufragios prácticamente ya contabilizados, el oficialismo también fue derrotado en Santa Fe y en Córdoba, provincias que forman parte del corazón agrícola del país y que fueron protagonistas de una feroz disputa que el Gobierno tuvo con los productores rurales en el 2008.
En Mendoza, el quinto distrito electoral de Argentina, el candidato impulsado por el vicepresidente Julio Cobos, enfrentado con la presidenta desde el conflicto con el agro, también venció al oficialismo.