Actualizado 10/05/2013 08:46

El Gobierno y la Central Obrera Boliviana negocian la reforma de las pensiones

LA PAZ, 10 May. (EUROPA PRESS) -

   El Gobierno y la Central Obrera Boliviana (COB) han instalado este jueves la mesa de negociaciones en el Ministerio de Trabajo, después de cuatro días de huelga general contra la reforma de las pensiones impulsada por el Gabinete de Evo Morales.

   El ministro de Trabajo, Daniel Santalla, ha invitado en una rueda de prensa a los líderes de la COB a acudir a su despacho a las 15.30 horas (21.30 horas en España) para iniciar un diálogo, aunque con la condición de que pusieran fin a la protesta.

   En respuesta, los líderes de la COB han anunciado que estaban dispuestos a sentarse a la mesa de negociaciones con el Gobierno, pero sin deponer las "medidas de presión", a modo una garantía.

   Santalla ha aceptado y ha vuelto a formular la propuesta de diálogo del Gobierno, esta vez sin condiciones, por lo que los líderes de la COB han acudido en torno a las 20.00 horas del jueves (2.00 horas del viernes en España) a la sede del Ministerio de Trabajo.

   La delegación del Gobierno está formada por Santalla y el ministro de Economía y Finanzas, Luis Arce Catacora; mientras que por parte de la COB han acudido su líder, Juan Carlos Trujillo, y representantes de los sindicatos mineros.

   A su llegada al Ministerio de Trabajo, donde todavía siguen reunidos, Trujillo ha aclarado que este primer contacto es para "fijar las reglas de juego del diálogo", de acuerdo con la Agencia Boliviana de Información (ABI).

   Es la primera vez que la COB ha accedido a sentarse a hablar con el Gobierno, en cuatro días en los que el Ejecutivo, a través de distintos portavoces, ha insistido en su voluntad de diálogo para evitar un conflicto social.

   Durante la huelga general, las autoridades han detenido a unas 100 personas por "movilizaciones violentas" y se han incautado de cientos de kilogramos de material explosivo con los que, al parecer, los huelguistas pretendían radicalizar la protesta.

   Por su parte, los huelguistas han llegado a bloquear las carreteras de siete de los nueve departamentos que forman Bolivia, incluidas las fronteras con Chile y Argentina, lo que, según el Gobierno, ha provocado graves pérdidas económicas.

SECUESTRO DE POLICÍAS

   El viceministro de Régimen Interior y Policía, Jorge Pérez, ha informado de que un grupo de mineros que participaban en la huelga general ha secuestrado a tres policías para canjearlos por los mineros detenidos por volar el puente de Caihuasi.

   Los cabos Rubén Aysacayo, Severo Rosas y Alberto Castillo fueron secuestrados el pasado miércoles cuando se encontraban fuera de servicio en la plaza principal de la localidad de Huanuni. Al parecer, ahora están en un centro minero.

   Pérez ha sostenido que el objetivo de los secuestradores es intercambiar a los tres policías por los 20 mineros detenidos por volar el puente de Caihuasi, pero ha explicado que el caso ha pasado ya a la Fiscalía, por lo que el Gobierno no puede hacer nada.

   Trujillo, que ha asegurado que el secuestro de estos tres policías no ha sido orquestado por la COB, se ha comprometido a facilitar la liberación de los uniformados, como gesto de buena voluntad en las negociaciones con el Gobierno.

EL CONFLICTO

   El Gobierno de Morales ha puesto en marcha una reforma de las pensiones por virtud de la cual los trabajadores jubilados cobrarán mensualmente una cantidad de dinero equivalente al cien por cien de los últimos salarios, desde el 70 por ciento actual.

   La COB exige que el Gobierno garantice pensiones mínimas de 8.000 bolivianos para los mineros que hayan trabajado al menos 35 años y de 5.000 bolivianos para los trabajadores de otros sectores productivos. El Ejecutivo ha aceptado 4.000 y 3.200, respectivamente.