MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Filipinas se han mostrado este lunes "alarmadas" ante el repunte de los casos de coronavirus tras el levantamiento de las restricciones en el país, por lo que han instado a la población a adherirse estrictamente a los protocolos de prevención.
El aumento de los casos se ha producido más de un mes después de que el Gobierno comenzará a retirar las medidas de restricciones impuestas en la zona de la capital, Manila, para evitar una mayor propagación del virus.
"Estamos alarmados porque la cifra de casos de coronavirus debería haberse mantenido o debería haber bajado, en vez de aumentar como lo ha hecho", ha lamentado el ministro del Interior, Eduardo Ano. "Debido a nuestra intención de reabrir la economía dependerá de cada individuo cómo decida adherirse a los estándares mínimos de seguridad y sanidad", ha expresado.
Así, ha señalado que la cuarentena impuesta permitió al Gobierno aumentar la capacidad de realizar test y rastrear los contagios, así como de mejorar los tratamientos y lograr aislar los casos. "Podemos decir que estamos preparados, pero la gente tiene que cooperar", ha afirmado.
El Ministerio de Sanidad ha informado de que se han constatado 2.099 casos adicionales de COVID-19, lo que sitúa en 46.333 la cifra total de contagios, mientras que el número de decesos es de 1.303 tras registrarse otros seis muertos en las últimas 24 horas, según informaciones del portal de noticias Rappler.
La cuarentena fue impuesta en la isla de Luzón, la más poblada, a mediados de marzo, si bien el pasado 1 de junio se reanudó el servicio de transporte público y se reabrieron los centros comerciales, las barberías y los restaurantes.