Publicado 24/11/2015 08:57

Google dedica doodle a Lucy, el ancestro humano más antiguo

   MADRID, 24 Nov. (Notimérica) -

   Cuando el paleoantropólogo estadounidense Donald Johanson descubrió a finales de noviembre de 1974 un pequeño trozo del hueso de un codo en la remota región etíope de Afar, tal vez no sabía que su descubrimiento iba a revolucionar lo que hasta entonces se conocía sobre el árbol genealógico de la evolución humana.

   Y es que no fue hasta pasados tres años del hallazgo que la comunidad científica tomó en consideración el descubrimiento de Johanson y su equipo del International Afar Research Expedition.

   Para celebrar ese hallazgo, este martes, 24 de noviembre, Google dedica un doodle interactivo que conmemora el 41 aniversario del descubrimiento de Lucy, el esqueleto fosilizado más completo hallado hasta la fecha de un homínido.

   El científico que la descubrió se dio cuenta enseguida de que era un ancestro humano. Tras el hallazgo de un pequeño trozo del hueso de un codo, Johanson y su equipo encontraron otros muchos restos.

   "Cuando miré hacia mi izquierda vi pedacitos de un cráneo, un trozo de mandíbula y un par de vértebras", comentaba en una entrevista con la BBC el investigador, quien se percató de que había encontrado la parte de un esqueleto de más de tres millones de años. Era ni más ni menos que el homínido más antiguo que se había encontrado hasta entonces. Y también el más completo: el 40% del esqueleto se había preservado.

   ¿QUIEN ERA LUCY?

   Debido a su tamaño, Johanson creía que el esqueleto era de una mujer. De vuelta al campamento, puso por la noche un disco de los Beatles: 'Lucy in the Sky with Diamonds', y alguien de su equipo le sugirió que podría bautizar con ese nombre el esqueleto recién encontrado.

   Lucy se convirtió en ese momento en una persona, que aún tardaría unos años en ser descrita oficialmente. Se trataba de una nueva especie llamada 'Australopithecus afarensis' y era uno de los fósiles más importantes nunca antes descubierto.

   Pero las preguntas surgieron de inmediato: ¿Qué edad tenía Lucy cuando murió? ¿Tenía hijos? ¿Cómo era? ¿Es nuestro ancestro directo, el eslabón perdido en la cadena de la familia humana?.

   Su cráneo, mandíbula y dientes eran más como los de un simio que las de otros Australopithecus. El lugar donde estaba encajado el cerebro era muy pequeño, no mayor que el de un chimpancé. Tenía una mandíbula robusta, una frente pequeña y brazos largos y colgantes.

   Pero Johanson se dio cuenta de inmediato de que caminaba erguida por la forma y posición de su pelvis. Sus rodillas y tobillos también reflejaban que caminaba en dos pies, un rasgo exclusivamente humano.

   Según fósiles hallados en Hadar, Lucy parece haber vivido dentro de un grupo social pequeño. Ella era pequeña en comparación con los hombres de su especie.

   También parece que la infancia de Lucy fue más corta que la nuestra y que tuvo que valerse por sí misma desde pequeña. Se sabe que era adulta porque tenía muelas de juicio y sus huesos estaban fusionados.

   Pero, a diferencia de los humanos modernos, parece haber crecido hasta alcanzar su tamaño muy rápido. Murió a los 12 años, y su cerebro alcanzó su tamaño final más rápido que el nuestro. En conclusión: Lucy era algo a mitad de camino entre los simios y los humanos.

   Aunque la ciencia sigue haciéndose preguntas, Lucy sigue siendo el mejor candidato a ancestro directo, según Tim White, investigador de la Universidad de California, quien considera no obstante que hace falta hallar más evidencia fósil de ese período.

   Sea como fuere, su descubridor, Johanson, cree que la contribución más importante de Lucy fue la de impulsar una ola de investigaciones que dio como resultado el descubrimiento de muchas nuevas especies, como el 'Ardipithecus' y el 'A. sediba'.

   Gracias a todos estos descubrimientos conocemos que el proceso de evolución que culminó en el actual ser humano no fue lineal, sino que por el camino, hubo variaciones y experimentación, y muchas especies acabaron extinguiéndose, como es el caso del hombre de Neanderthal.