Actualizado 08/07/2009 23:28

Gran Bretaña ajustará supervisión bancaria: ministro

Por Huw Jones

LONDRES (Reuters/EP) - El gobierno de Gran Bretaña dijo el miércoles que ajustará la forma en que controla a los bancos, revisa los bonos pagados a sus empleados y castigará con más dureza la indisciplina, en un esfuerzo por prevenir que se repita la crisis crediticia.

La peor crisis financiera desde la Gran Depresión de la década del 1930 forzó a Gran Bretaña a inyectar miles de millones de libras de los contribuyentes para nacionalizar a los bancos Northern Rock y Bradford & Bingley.

"Las entidades financieras en muchos países tomaron demasiados riesgos", dijo el ministro de finanzas, Alistair Darling, al parlamento.

"También está claro que algunas instituciones financieras no se daban mucha cuenta de lo que sucedía dentro de sus negocios", resaltó.

El estado británico también pasó a ser dueño de un 70 por ciento de Royal Bank of Scotland y a poseer un 43,4 por ciento en Lloyds Banking Group luego que tuvo que rescatarlos.

Darling dijo que ahora quiere revertir esa situación pero no indicó un plazo para ello.

Las medidas anunciadas el miércoles buscan evitar que un banco se meta en tantos que problemas como para desestabilizar al sistema financiero general.

Pero Darling evitó introducir medidas que fragmenten a los grandes bancos y, en cambio, presentó otras que requieren capital adicional de acuerdo al nivel de riesgo, un decisión que celebró el lobby de negocios CBI.

Su anuncio refleja en gran medida las iniciativas en las que ya se embarcaron en la Unión Europea y los niveles globales para mejorar la supervisión de riesgos sistémicos y forzar a los bancos a tener más capital para no precisar salvatajes gubernamentales en el futuro.

Una medida principal es formalizar la configuración "tripartita" existente bajo la cual el ministerio de finanzas, la Autoridad de Servicios Financieros y el Banco de Inglaterra supervisan a los mercados financieros en forma conjunta.

Este diseño fue ampliamente visto como incapaz de detectar tempranamente problemas en Northern Rock y otros bancos, pero Darling se opuso a su anulación. En cambio, los tres organismos trabajarán más cerca del Concejo de Estabilidad Financiera, dijo.

"Esto no lidiará sólo con las cuestiones inmediatas, sino que también supervisará la estabilidad financiera de todo el sistema y responderá a los riesgos a largo plazo a medida que surjan", aseguró Darling.

El momento de cualquier cambio es crucial, afirman los bancos. Elevar los requisitos de capital demasiado rápido podría arriesgar a los bancos a quedarse con menos dinero para prestar y para, de ese modo, ayudar a la recuperación económica.

También podría poner a la industria en desventaja competitiva respecto de las de otros países si éstos no hacen lo mismo al mismo tiempo, comentó Angela Knight, presidente de la Asociación de Banqueros Británicos.

El partido conservador del Reino Unido, que habría de ganar las elecciones generales de junio del 2010, dijo que los planes de Darling eran inadecuados y quiere que el banco central cumpla un rol más fuerte.

(Con la colaboración de Sumeet Desai y Adrian Croft; Mesa de edición en español +562 437 4411)

REUTERS JB MN /