Actualizado 20/07/2009 20:53

Grupo de activista rusa asesinada se retira de Chechenia

Por Amie Ferris-Rotman

MOSCU (Reuters/EP) - El grupo de derechos humanos ruso donde trabajaba la activista asesinada Natalia Estemirova dijo el lunes que había suspendido sus operaciones en Chechenia para proteger la seguridad de sus colegas.

"Tomamos esta decisión en condiciones donde la vida, salud y seguridad de nuestros empleados están seriamente amenazadas", dijo Memorial, una de las más prominentes y antiguas ONGs de Rusia, en un comunicado publicado en su sitio de internet www.memo.ru.

Estemirova, que trabajaba para Memorial en la capital chechena, Grozni, fue secuestrada el 15 de julio cuando salía de su casa. Su cuerpo con dos heridas en la cabeza fue arrojado en la vecina región de Ingusetia.

Su asesinato, el más reciente de una serie de atentados contra periodistas y defensores de los derechos humanos en Rusia, desató la condena internacional.

"Cerramos la oficina por una cuestión de seguridad y también como una forma de protesta para atraer la atención de las autoridades regionales y federales", dijo a Reuters Shakhman Akbulatov, jefe de la oficina de Memorial en Grozni.

Memorial seguirá investigando los supuestos abusos de los derechos humanos desde Ingusetia, dijo la portavoz Yulia Klimova.

Akbulatov dijo que un telegrama enviado por el presidente ruso Dmitry Medvedev, en el cual le prometió que lanzaría una amplia investigación y condenaría a sus asesinos, le dio "algo de esperanza", pero que se necesita una acción concreta.

Un portavoz del líder checheno Ramzan Kadyrov, que condenó el asesinato y prometió hallar a los responsables, dijo el lunes que una corte de Moscú había aceptado su demanda por calumnias contra el jefe de Memorial, Oleg Orlov, que lo culpó por la muerte de Estemirova.

Medvedev dijo que la acusación contra Kadyrov era "primitiva" y claramente apuntaba contra las autoridades rusas.

La oposición acusa a Kadyrov de cometer masivas violaciones de los derechos humanos en Chechenia, escenario de dos guerras separatistas contra Rusia en la década de 1990, y de no tolerar voces disidentes en la región. El líder rechaza los cargos.