Actualizado 28/06/2006 03:17

Guantánamo.- Los suicidas de Guantánamo habían aprobado los exámenes psicológicos


GUANTÁNAMO (CUBA), 28 Jun. (EP/AP) -

Los tres prisioneros de la base naval de Guantánamo que se ahorcaron dentro de sus celdas habían sido sometidos a pruebas psicológicas unos días antes de sus suicidios y no mostraron indicios de estar deprimidos, aseguró el martes un médico militar.

El doctor sugirió que los exámenes, efectuados una o dos semanas antes de los suicidios ocurridos el 10 de junio, respaldan la afirmación de las autoridades militares de que los prisioneros se inmolaron por un acto político, no porque estuvieran hartos de su prolongada detención.

"Ninguno había mostrado indicios de estar deprimido o de tener algún problema mental", señaló el doctor, quien es encargado médico a cargo de esta remota prisión estadounidense en el extremo sudeste de Cuba. El funcionario habló bajo condición de permanecer en el anonimato debido a razones de seguridad.

Los tres detenidos, dos sauditas y un yemení, fueron sometidos a exámenes psicológicos como una mera formalidad porque recientemente habían participado en una huelga de hambre, e incluso uno de ellos se negó a tomar comidas durante 180 días. El Ejército informó que fueron hallados ahorcados en sus celdas, al colgarse de tiras de tela que obtuvieron de sábanas.

Tras los suicidios, el almirante Harry Harris, el comandante del centro de detención estadounidense, calificó estos fallecimientos como un acto de "guerra asimétrica" en contra del Ejército estadounidense.

"Si me piden mi opinión, estoy de acuerdo con el almirante en el sentido de que fue algo parecido a una declaración política", señaló el médico a los periodistas que visitaron la base naval.

El médico indicó que el personal médico examinó a los detenidos unos 10 minutos después de que fueron encontrados e "hicimos todo lo que pudimos" para resucitarlos, incluido el uso de defibriladores.

El médico sugirió que los guardias estadounidenses podrían haber descubierto antes lo ocurrido a los detenidos si la prisión no hubiera cumplido con las recomendaciones de la Cruz Roja Internacional, sobre el nivel de comodidad que deberían tener los detenidos, como el grado de oscuridad que las celdas deberían de tener durante las noches.