Actualizado 28/07/2019 09:00

Los dos aspirantes a la presidencia de Guatemala cuestionan el acuerdo migratorio con EEUU

CIUDAD DE GUATEMALA, 28 Jul. (Reuters/EP) -

Los dos aspirantes a la presidencia de Guatemala han cuestionado este sábado el acuerdo alcanzado con el presidente estadounidense, Donald Trump, que busca frenar el flujo ilegal hacia el norte de migrantes centroamericanos.

Trump aceptó eliminar las amenazas económicas contra Guatemala después de que el país accediese a albergar en su territorio a solicitantes de asilo, en un tratado que fue descrito por Estados Unidos como un acuerdo de "tercer país seguro".

Sin embargo, el Gobierno de Guatemala ha evitado usar ese término y ha asegurado que el convenio no debería ser aprobado por el Congreso, después de que la Corte de Constitucionalidad dictaminase previamente que un acuerdo de "tercer país seguro" necesitaría la aprobación del legislativo.

Este hecho ha llevado a los dos candidatos a suceder al presidente guatemalteco, Jimmy Morales --quienes competirán en una segunda ronda electoral el próximo 11 de agosto-- a poner en duda el acuerdo que el ministro de Gobernación, Enrique Degenhart, firmó para Guatemala en Washington.

"Hay que analizar muy bien si el ministro tenía facultad para firmar un acuerdo con esas características internacionales. De todas formas el acuerdo tiene que ir al Congreso", ha señalado la candidata centroizquierdista Sandra Torres, que además ha liderado la primera ronda electoral que se celebró en junio.

Torres, quien ha hecho estas declaraciones en un mitin en Chichicastenango, al norte de la capital, ha pedido a los congresistas de su partido UNE convocar a Degenhart y a la ministra de Asuntos Exteriores, Sandra Jovel, para explicar ante el Congreso cómo se negoció el acuerdo.

Mientras tanto, su rival por la presidencia, el conservador Alejandro Giammattei, ha calificado el acuerdo como "una mala noticia para Guatemala".

"No podemos asegurar un país a los propios, menos a los ajenos. Se abre el camino escabroso para el presidente Morales porque según la resolución de la Corte de Constitucionalidad ese convenio tiene que pasar forzosamente por el Congreso", ha afirmado Giammattei a la cadena de televisión CNN.

Los gobiernos de Estados Unidos y Guatemala firmaron este viernes el acuerdo migratorio para que Guatemala se convierta en un tercer país seguro y acoger allí a los solicitantes de asilo mientras se resuelven sus procesos en la potencia norteamericana.

Trump dijo que expandirá además el acceso al programa de visados para ayudar a empresas, granjas y ranchos. El mandatario estadounidense defendió además que el pacto "pondría fin a los abusos generalizados del sistema y a la paralizante crisis en la frontera", antes de adelantar que pronto firmará acuerdos similares con otros países.

El Gobierno de Guatemala confirmó la firma del acuerdo y destacó que se enmarca en un proceso de conversaciones con Estados Unidos "con el objetivo de contrarrestar graves repercusiones económicas y sociales, que son de dominio público".

Este acuerdo tendrá una vigencia de dos años y podrá renovarse antes de su vencimiento, según el documento oficial que ha sido publicado por el Gobierno de Guatemala. Además, cualquier parte podrá dar por terminado este acuerdo --que será revisado cada tres meses-- con tres meses de antelación.

Estados Unidos ha endurecido su política migratoria en respuesta a las decenas de miles de personas que el pasado mes de octubre empezaron a marchar en caravana desde El Salvador, Honduras y Guatemala a través de México para alcanzar suelo estadounidense, si bien la mayoría se han quedado varadas en la frontera sur de la potencia norteamericana.

La Administración Trump pretende que los países emisores endurezcan los controles migratorios y se ocupen de los migrantes deportados por Estados Unidos hasta que se resuelvan sus proceso de asilo, bajo amenaza de retirar las ayudas que reciben desde Washington. En el caso de México, con quien ya hay acuerdo, amenazó con un arancel a las importaciones mexicanas.