Actualizado 11/02/2014 03:57

EEUU sentencia a 10 años de cárcel a un exmilitar guatemalteco


LOS ANGELES, 11 Feb. (Reuters/EP) -

El excomandante del Ejército de Guatemala Jorge Sosa ha sido condenado a 10 años de cárcel por mentir --durante los trámites para lograr los papeles de ciudadanía en Estados Unidos-- respecto a su participación en la masacre de 250 hombres, mujeres y niños, ocurrida en 1982, durante la violenta guerra civil de Guatemala.

Los fiscales dicen que Jorge Sosa mintió a los funcionarios de Inmigración sobre su participación en el genocidio de 1982 en el poblado agrícola de Dos Erres, en el que ha sido considerado como una de las peores atrocidades durante los 36 años de guerra civil en el país centroamericano.

Debido a que los fiscales estadounidenses no tienen jurisdicción en Guatemala, no pueden acusar a Sosa, también conocido como Jorge Vinicio Sosa Orantes, por los asesinatos. Sin embargo, cumplirá los diez años marcados por el juez por falso testimonio, mientras que su ciudadanía estadounidense ha sido revocada en la condena.

"Jorge Sosa ayudó a orquestar la masacre de pobladores inocentes, entre ellos decenas de niños pequeños, y luego mintió sobre su pasado para obtener refugio en Estados Unidos", ha explicado la asistente interina del fiscal general Mythili Raman en un comunicado, emitido tras el dictamen.

En este sentido, la propia Raman, ha dicho que este juicio demuestra la "convicción" de Estados Unidos en "negarle protección a los violadores de Derechos Humanos y asegurar que estos criminales sean juzgados". Sosa fue arrestado en Canadá en 2011 y en 2013 fue condenado por mentir en su formulario de naturalización en 2007.

Según la acusación, Sosa era comandante de una unidad de fuerzas especiales del Ejército guatemalteco conocida como los Kaibiles, que mató a casi todos los residentes de Dos Erres, golpeando en varias ocasiones a las víctimas con un mazo y luego lanzando los cuerpos a un pozo. Además, muchas mujeres y niñas del poblado fueron violadas antes de ser asesinadas.

La citada unidad del Ejército fue enviada a Dos Erres para encontrar a miembros de una guerrilla que emboscó a una caravana militar en noviembre de ese año, causando la muerte de soldados y robando sus armas.