Actualizado 07/10/2011 15:24

Haití.- Conille dice que una de sus prioridades será ayudar a las 600.000 personas que aún viven en campamentos


MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El nuevo primer ministro de Haití, Garry Conille, ha afirmado que una de sus prioridades será ayudar a las 600.000 personas que, más de un año y medio después del devastador terremoto de enero de 2010, siguen viviendo en campamentos.

"Por supuesto, vamos a priorizar a las 600.000 personas que viven en tiendas de campaña. Entendemos la necesidad de crear puestos de trabajo rápidamente y seguiremos incidiendo en la idea del presidente de que todos los niños deben ir al colegio", dijo Conille este jueves en una entrevista con la cadena CNN.

"Es hora de que los haitianos se unan, acuerden una agenda común, se entusiasmen al ver lo que podemos hacer juntos y lo hagan posible", declaró el nuevo primer ministro, que fue confirmado en el cargo esta semana (con la aprobación del Senado, que se sumó a la de la Cámara de Diputados), seis meses después de las elecciones.

Los senadores rechazaron al empresario Daniel Rouzier y al abogado Bernard Gousse, los dos candidatos presentados previamente por el presidente, Michel Martelly.

"Al elegirme a mí --como saben, el presidente ha elegido a alguien que no forma parte de su círculo íntimo--, creo que su intención era transmitir el mensaje de que quería a alguien que pudiese ser neutral (...) Yo puedo unir a las distintas partes en torno a su perspectiva y traer el cambio al pueblo haitiano", aseguró.

Conille, un ginecólogo de 45 años, es visto como una persona con experiencia en temas de desarrollo y en trabajar con la comunidad internacional. Ha trabajado para Naciones Unidas desde 1999, realizando su labor en Etiopía, Haití y Níger, y también fue jefe de gabinete del expresidente estadounidense Bill Clinton, enviado especial de la ONU para Haití.

El primer ministro indicó que hay muchas maneras de resolver los problemas de su país, como educar a los niños y ofrecer una atención sanitaria universal. Lo fundamental es, en su opinión, unir a las autoridades, los jóvenes, los líderes religiosos, los miembros de la sociedad civil y la comunidad internacional "para que cada uno desempeñe su papel". "Hay que reconocer ya que esto no es un monólogo", añadió.

Conille reconoció que hay muchos obstáculos que superar pero afirmó que está comprometido con su labor. "Creo que los haitianos se van a dar cuenta muy pronto de que estoy aquí para defender sus intereses y asegurarme de que su nivel de vida mejora, pero también voy a estar abierto a posibles asociaciones", declaró.

El jefe del Gobierno haitiano apuntó que la comunidad internacional aporta entre el 80 y el 85 por ciento del presupuesto de inversiones de su país. "Así que para hacer lo que queremos hacer será esencial tener asociaciones sólidas y responsables", recalcó.