Publicado 25/02/2020 11:18

Haití.- El Gobierno de Haití acusa a los policías de "un intento de golpe de Estado"

MADRID, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio de Justicia de Haití ha denunciado "un intento de golpe de Estado" por parte de los policías, que el domingo protagonizaron unas protestas para reclamar unas mejoras de sus condiciones laborales que concluyeron en un ataque contra un cuartel y enfrentamientos con militares.

Los incidentes más graves tuvieron lugar en el céntrico Campo de Marte, en Puerto Príncipe, donde un grupo de agentes atacó un cuartel de las Fuerzas Armadas situado en las inmediaciones del Palacio Nacional. Al menos dos personas murieron por los choques posteriores y una decena más resultaron heridas.

El Ministerio de Justicia ha expresado su "preocupación" en un comunicado en el que ha cargado directamente contra los policías, a los que ha acusado de cumplir la directiva de "proteger y servir" que teóricamente se le atribuye al cuerpo. Se trata, ha advertido, "de un intento de golpe de Estado contra un presidente de la República elegido de forma legítima por el pueblo haitiano".

Así, ha advertido de que las reivindicaciones de los policías, "por legítimas que sean", no pueden justificar "acciones horribles", por lo que ha instado a este colectivo a permanecer en todo momento "dentro del marco de la ley" y desmarcarse de posibles grupos violentos.

LA ONU ESTÁ "PREOCUPADA"

También la Oficina Integrada de Naciones Unidas en Haití (BINUH), heredera de la antigua misión de paz, ha expresado su preocupación por "la utilización de la violencia como medio de reivindicación", en alusión a los "graves incidentes".

La BINUH ha instado a los agentes que reivindican una mejora de su situación laboral a que "eviten toda situación que pueda provocar la escalada de las tensiones", al tiempo que ha llamado a las fuerzas de seguridad a responder "de manera proporcionada" ante posibles amenazas.

Asimismo, la oficina de Naciones Unidas ha alentado a todas las partes a "buscar soluciones por vías pacíficas y dentro del funcionamiento de las instituciones democráticas y los parámetros establecidos en la Constitución.

El país caribeño vive sumido en una crisis política, con un gobierno en funciones desde hace casi un año y un contexto de tensiones sociales que ha dejado como consecuencia movilizaciones prácticamente constantes. Las organizaciones humanitarias han denunciado incluso problemas para repartir la ayuda.