TEGUCIGALPA, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno 'de facto' de Honduras, que encabeza Roberto Micheletti, confía en superar el estancamiento en que ha caído el diálogo entre las distintas facciones políticas para resolver la crisis que atraviesa el país desde el golpe de Estado del 28 de junio, según señaló a última hora de este viernes el representante del Ejecutivo interino en la Comisión de Verificación del último acuerdo en discusión, Arturo Corrales.
En teoría, estos contactos debían concluir esta semana con un Gobierno de unidad nacional del que formarían parte representantes de Micheletti y del mandatario depuesto, Manuel Zelaya. Sin embargo, el presidente 'de facto' anunció este jueves la creación de un gabinete en el que no participaban 'zelayistas', lo que ha terminado por elevar las tensiones en el país centroamericano.
"Al pueblo le pido que no desfallezcamos, les pido que aunque parezca que todo está terminado, no es cierto", aseguró Corrales, quien reconoció que, a vista de la opinión pública, la ruptura del diálogo parece "rotunda" y "total", según informaciones de 'La Tribuna'. "Los hondureños sabemos discurrir en medio de estos problemas", agregó.