Actualizado 26/08/2008 05:55

Honduras.- Honduras se adhiere al ALBA ante la mirada crítica de Estados Unidos

TEGUCIGALPA, 26 Ago. (Reuters/EP) -

Honduras se adhirió hoy a la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), una iniciativa del presidente venezolano, Hugo Chávez, con la que el acérrimo crítico de Estados Unidos espera aumentar su influencia en Centroamérica.

El presidente hondureño, Manuel Zelaya, lo celebró con un acto público realizado ante unas 50.000 personas frente a la sede de la presidencia, acompañado de Chávez, del presidente de Bolivia, Evo Morales, de Nicaragua, Daniel Ortega, y del vicepresidente de Cuba, Carlos Lage.

El ALBA, ahora integrada por Bolivia, Cuba, Honduras, Nicaragua, Dominica y Venezuela, nació como una alternativa de integración comercial y de asistencia financiera entre los países miembros impulsada por Chávez para combatir al ALCA, una fallida iniciativa de libre comercio continental de Estados Unidos.

La adhesión se produjo en medio de críticas de empresarios y políticos hondureños, incluso del propio partido de Zelaya, que creen que el acercamiento a Chávez dañará a Honduras en sus relaciones con Estados Unidos, del que ha sido un tradicional aliado y que es su principal socio comercial y de inversiones.

Chávez, quien dio un largo discurso en el acto, defendió su iniciativa como una forma de asistir a millones de pobres de los países miembros y dijo que si un hondureño se opone al ALBA "es un ignorante o es un vendepatria". El mandatario venezolano prometió un fuerte incremento al comercio con Honduras, combatir el analfabetismo, ayuda alimentaria, créditos para medianos y pequeños productores agrícolas y energía.

"Toda la energía que necesite o los recursos energéticos, petróleo y sus derivados, fuentes alternativas de energía que necesite Honduras los tiene asegurado al menos por 100 años", manifestó Chávez, ovacionado por la multitud entre la que asomaban banderas de distintos partidos de izquierda centroamericanos. El Gobierno de Estados Unidos ha acusado a Chávez de utilizar los recursos de un país petrolero como Venezuela para sumar aliados en Latinoamérica.

INMIGRACION Y POBREZA

A los temores de los empresarios se sumaron los de la población en general sobre la suerte de cerca de un millón de inmigrantes, la mayoría ilegales, que viven en Estados Unidos y envían a su país remesas que son el sostén de muchas familias pobres. "He visto muchas deportaciones últimamente", dijo Griselda Matute, una empleada de 40 años, cerca de un mercado popular en Tegucigalpa. "Me da temor que por eso del ALBA Estados Unidos esté tomando represalias sin decirlo", añadió.

Zelaya, un empresario agropecuario al que le queda cerca de año y medio en el Gobierno, comenzó a acercarse en los últimos dos años a Chávez, a pesar de pertenecer al Partido Liberal, de los más tradicionales de Honduras. "Si el sistema que ha gobernado Honduras durante 40 años hubiera resuelto la pobreza (...) no estaríamos viendo hacia el sur, hacia el socialismo del sur", comentó Zelaya, quien sumó hace poco a Honduras a Petrocaribe, asociación en la que Venezuela provee de petróleo a 23 naciones pobres en ventajosas condiciones.

Centroamérica, con más de 70 por ciento de la población en la pobreza, ha sido duramente golpeada por los altos precios internacionales del crudo, así como por un alza global de los alimentos. "Con el ALBA nos van a ayudar a cultivar la tierra y a mejorar nuestra situación", indicó Carmen Martínez, de 52 años, quien viajó desde el pueblo de Yuscarán, al este del país, para asistir a la celebración. El Gobierno reconoció que puso dinero para trasladar a las miles de personas presente en el acto.