Actualizado 15/05/2008 06:48

Honduras.- Miles de personas marchan contra la violencia criminal en Honduras

TEGUCIGALPA, 15 May. (Reuters/EP) -

Miles de hondureños con pañuelos blancos marcharon ayer en la norteña ciudad de San Pedro Sula, la más violenta del país, para condenar una escalada de crímenes estimulada por las venganzas entre bandas, especialmente del narcotráfico.

Una enorme manta blanca con la inscripción "Recuperemos la Paz" encabezó la llamada Marcha por la Paz, convocada por la Iglesia Católica, empresarios y gremios de la región. La manifestación culminó en el atrio de la Catedral de la ciudad, a 165 kilómetros al norte de Tegucigalpa, donde se liberaron decenas de palomas.

"¡Queremos paz!", coreaban los más de 30.000 congregados, vestidos con ropas blancas. Algunas mujeres llevaban fotografías de sus hijos, asesinados en hechos violentos. San Pedro Sula, la segunda ciudad más importante de la nación centroamericana y la más activa comercial e industrialmente, está en el centro de la actividad de bandas de narcotraficantes dedicadas a transportar cocaína de Colombia hacia el mercado de Estados Unidos, según investigadores.

Los episodios de violencia, entre ellos asesinatos en plena calle y ataques en clubes nocturnos, atribuidos por autoridades a enfrentamientos entre grupos rivales de delincuentes, son frecuentes y pocos se esclarecen. "La ciudad está harta de tanta sangre. Todos los días muertos y muertos (...) aquí hay un montón de madres que están llorando todos los días y esta ola de sangre no para", dijo a periodistas el obispo auxiliar de San Pedro Sula, Rómulo Emiliani.

"Esto es un infierno (...) la gente no quiere salir de noche, hay un miedo tremendo", agregó el prelado. En la zona también operan bandas dedicadas al tráfico de personas, robo de vehículos y secuestros. El Gobierno del presidente Manuel Zelaya no ha podido cumplir con sus promesas de ponerle freno a la violencia que azota al país, una de las naciones más pobres de América.

La violencia se ha extendido a las cárceles, donde 27 reos fueron asesinados en menos de una semana, en enfrentamientos entre presos comunes, miembros de bandas del crimen organizado y de maras o pandillas. "La gente no aguanta tanta criminalidad, tanta delincuencia", dijo el presidente de la Cámara de Comercio de San Pedro Sula, Oscar Galeano.