Actualizado 19/11/2007 17:44

Iberoamérica.- Alejandro Toledo aboga por luchar contra la pobreza enseñando a pescar, no "regalando peces" como Chávez

Toledo acusó a Chávez de financiar grupos desestabilizadores por toda América Latina


MADRID, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente peruano, Alejandro Toledo, manifestó hoy en Madrid su deseo de dedicar su vida a estudiar la relación entre democracia y pobreza con el fin de combatir esta última. Toledo apostó, en este sentido por "el derecho de aprender a pescar", en contraste con la fórmula de Chávez que, según el ex mandatario peruano consiste "en regalar pescado".

"Si no enfrentamos este tema (la lucha contra la pobreza) estamos poniéndole abono al surgimiento del populismo vacío, que con una billetera gorda tratan de enfrentar el problema de la pobreza regalándole pescado a los pobres, insultando su dignidad, dándole pan regalado", afirmó en referencia al presidente de Venezuela, Hugo Chávez.

El ex dirigente peruano aprovechó para arremeter contra la política de Chávez con respecto al petróleo. "El petróleo se ha convertido en el arma política más peligrosa del mundo ahora. Un barril a cien dólares, los países pobres que no son productores de petróleo se vuelven más pobres. Y cuando sube el petróleo, sube el transporte y los alimentos y los pobres se vuelven más pobres", agregó.

"En mi opinión, Hugo Chávez es un factor desestabilizador de América Latina. Está tratando de meter oficinas, gente de contrabando allá donde están los pobres financiando grupos para desestabilizar", acusó.

Toledo también aprovechó para defender la necesidad de las inversiones, en particular las de empresas españolas, en América Latina. "Para crecer necesitamos inversiones. Usted no puede redistribuir pobreza", afirmó.

Sin embargo, el dirigente matizó que las empresas deben cumplir con ciertos requisitos. "Necesitamos las inversiones extranjeras pero con el compromiso de respetar el medio ambiente, de darle estabilidad, seguridad ocupacional a los trabajadores, de compartir parte de su ganancia y de respetar la idiosincrasia cultural de los pueblos donde se instalan las empresas", explicó.

"En el Perú tenemos la Telefónica, tenemos petroleras, gente que está en el sector agroindustrial. A mi me parece muy bien, pero hay que compartir las ganancias para evitar el ruido de las calles en América Latina", indicó. "Si el crecimiento no logra redibujar el rostro social de nuestro continente, los ruidos en las calles van a crecer".

Toledo se encuentra hoy en Madrid para formalizar su ingreso en el Club de Madrid, una asociación de la que forman parta unos 70 ex jefes de Estado y de Gobierno que comparten sus experiencias con el objetivo de promover el fortalecimiento de la democracia en el mundo y facilita asesoramiento a sus miembros y otros líderes e instituciones que trabajan en procesos de transición y consolidación democráticas, tal como se define en su página web.

"Es un gran honor. Representa un gran banco de experiencias que tiene una enorme potencialidad de jugar un papel preponderante en el mundo, particularmente en el mundo en desarrollo", afirmó.

Toledo también destacó que el Club de Madrid "no es un lugar de investigación académica sofisticada, y le dice un profesor de la universidad de Stanford, pero sí creo que tiene la experiencia para aconsejar a nuestros colegas que están hoy día ejerciendo la responsabilidad de gobernar nuestros países", opinó.

También destacó la utilidad que podría tener esta organización a la hora de contribuir a buscar soluciones a cuestiones que trascienden la política de los distintos países como el medio ambiente, la seguridad global, la transferencia tecnológica y la lucha contra la pobreza.