Actualizado 08/09/2011 14:52

Iberoamérica.- Los países iberoaméricanos participan en alrededor de 1.200 proyectos de cooperación mutua cada año

La cooperación regional se ha desarrollado en un contexto de desplazamiento de Iberoamérica de la Ayuda Oficial al Desarrollo


MADRID, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los países iberoamericanos participan cada año en alrededor de 1.200 proyectos de cooperación Sur-Sur, más del 90 por ciento de los cuales están patrocinados y financiados por siete países (Argentina, Brasil, Cuba, México, Venezuela, Chile y Colombia) en un contexto mundial de desplazamiento de Iberoamérica de la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD), según revela el informa sobre la Cooperación Sur-Sur en Iberoamérica correspondiente al periodo 2007-2011.

La cooperación Sur-Sur entre los países latinoamericanos "es un ejemplo mundial para las regiones en vías de desarrollo", declaró este jueves el secretario general iberoamericano, Enrique V. Iglesias, durante la presentación del informe en la sede de la Secretaría General de Iberoamérica (SEGIB) en Madrid.

Esta forma de cooperación es el resultado de "un regionalismo activo que siempre lo ha habido", pero que se ha reforzado "en los últimos tiempos" mediante "proyectos, iniciativas y actividades en distintos campos, como el petróleo, las comunicaciones y los transportes", añadió.

En el mismo sentido, la directora para América Latina y el Caribe de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), Julia Olmos, destacó que "no hay otra región en el mundo en la que la cooperación al desarrollo Sur-Sur entre países haya llegado tan lejos", lo cual se ha visto facilitado por "la comunidad de valores y de lengua" y reforzado por "el respeto a la individualidad y la pluralidad" de los países.

Según Olmos, "todos" los proyectos Sur-Sur iberoamericanos están financiados con dinero público, por lo que conllevan "una obligación para con los ciudadanos" y la necesidad de "medir el impacto de las acciones" y de comunicar "a la ciudadanía lo que se está haciendo".

COOPERACIÓN BILATERAL Y TRILATERAL

Durante la presentación del informe, la investigadora de SEGIB y experta en economía internacional y desarrollo económico Cristina Xalma explicó las grandes líneas generales de la cooperación Sur-Sur en Iberoamérica en el periodo 2007-2011, una cooperación que, destacó, se basa en los criterios de "horizontalidad, solidaridad, interés y beneficio mutuo", en "la reciprocidad y respeto de la soberanía nacional" y en la primacía del "intercambio de conocimiento sobre el intercambio financiero".

Según Xalma, desde 2000 a 2009, los países iberoamericanos se han visto desplazados respecto al resto del mundo en vías de desarrollo en la recepión de la Ayuda Ofical al Desarrollo, desde el 6,5 por ciento del primer año al 4,5 por ciento del total que recibe en la actualidad.

Esa evolución difiere de la tendencia de la ayuda oficial ofrecida concretamente por España, que ha pasado en el mismo periodo de 241 millones de dólares a 1.066 millones de dólares, lo que le ha permitido pasar de ser el quinto al segundo donante internacional a la región, únicamente superada por Estados Unidos.

Para paliar la tendencia global de descenso de la ayuda a la AOD, los países iberoamericanos han desarrollado programas de cooperación Sur-Sur basados en un triple esquema: el bilateral, el regional (cuando implica a más de dos países) y el triangular (cuando cuenta con la participación de donantes tradicionales no iberoamericanos).

Con este marco, desde hace cinco años los países iberoamericanos han impulsado, cada año, un mínimo de 1.200 proyectos de cooperación bilateral Sur-Sur y 60 proyectos anuales de cooperación trilateral. El principal objetivo de estos proyectos ha sido el desarrollo de las capacidades de los países de la región en ámbitos mayoritariamente socio-económicos, explicó Xalma.

En el ámbito bilateral, siete de los 19 países latinoamericanos (Argentina, Brasil, Cuba, México, Venezuela, Chile y Colombia) protagonizan entre el 90 y el 95 por ciento de los proyectos, seguidos de Costa Rica, Ecuador, Perú y Uruguay. Los principales beneficiarios de estos programas son Bolivia, El Salvador, Guatemala, Nicaragua y Paraguay.

Entre los proyectos bilaterales del periodo 2007-2011, destacan los de alfabetización patrocinados por Cuba, los bancos de leche materna de Brasil, los proyectos de desarrollo de técnicas agrícolas o los programas de fortalecimiento de las instituciones de cooperación, patrocinados por Colombia y Chile en colaboración con Uruguay, Costa Rica y Guatemala, entre otros.

En cuanto al ámbito trilateral, los principales "primeros oferentes" son Chile, México, Brasil y Argentina y los "segundos oferentes" más destacados son Japón, Alemania y España. Los receptores de las ayudas en este marco son "todos los países de América Latina", precisó la investigadora. La colaboración de los "segundos oferentes" (los actores no iberoamericanos) suele tener un doble carácter financiero y técnico.

Entre estos proyectos trilaterales --caracterizados por su "mayor complejidad científica y tecnológica", según Xalma--, destacan la construcción de viviendas resistentes a los terremotos para poblaciones de bajos ingresos (patrocinados por México y Japón en El Salvador), el fortalecimiento del sistema fitosanitario nacional (Argentina y Japón en Perú), el apoyo a la gestión de residuos sólidos (México y Alemania en República Dominicana y Ecuador) o el desarrollo de los servicios públicos de atención a la ciudadanía (Chile y España en Paraguay).