Publicado 11/08/2020 16:23

El índice de aprobación de Bolsonaro sigue aumentando a pesar de las críticas por la gestión del coronavirus

Coronavirus.- El índice de aprobación de Bolsonaro sigue aumentando a pesar de s
Coronavirus.- El índice de aprobación de Bolsonaro sigue aumentando a pesar de s - Alan Santos/Palacio Planalto/dpa

MADRID, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -

El índice de aprobación del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ha aumentado hasta un 45 por ciento a pesar de la gestión de la pandemia de coronavirus en el que es el segundo país del mundo más afectado, con 3 millones de casos y unos 100.000 muertos.

A pesar de las situación que atraviesa el país y de las duras críticas vertidas a nivel nacional e internacional contra Bolsonaro, que también contrajo COVID-19, y su Gobierno, el mandatario sigue contando con un gran número de fieles seguidores, según muestran los resultados de un sondeo realizado por PoderData.

El alto número de víctimas y el escepticismo mostrado por el presidente --que tildó el coronavirus de "pequeña gripe" en marzo-- no se ha traducido en un descenso del apoyo y la aprobación de Bolsonaro.

El dirigente ha logrado, además, que las críticas por la crisis económica, la deforestación del Amazonas y la pandemia, no se traduzcan en un batacazo a nivel político. Sus detractores, por otra parte, han evitado salir a la calle para protestar contra la gestión de la Administración por temor a contagiarse.

Sin embargo, varios sindicatos y movimientos han convocado pequeñas marchas y protestas contra Bolsonaro. El pasado viernes, un grupo de personas se reunió ante la catedral de Sao Paulo para expresar su desencanto por la alta cifra de muertes por la pandemia.

Bolsonaro no es el único político que ha logrado reducir las consecuencias políticas de la pandemia. Al otro lado del espectro político se encuentra el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, que también ha quitado importancia al virus.

Como López Obrador, que no ha impuesto un confinamiento en todo el país, Bolsonaro ha rechazado aquellas medidas de restricción para frenar el avance del virus alegando que es más importante mantener una economía fuerte.