Actualizado 04/03/2015 12:55

Indonesia traslada al brasileño condenado a muerte para su ejecución

Rodrigo Gularte
Foto: YOUTUBE

    MADRID/RÍO DE JANEIRO, 4 Mar. (Notimérica/EP) -

   Las autoridades de Indonesia han trasladado este miércoles a doce presos, entre los que se encuentra el brasileño Rodrigo Gularte, de 42 años, a la cárcel de Kerobokan, ubicada en la isla de Kambangan y conocida como 'La Alcatraz de Indonesia', según ha informado el diario indonesio 'The Jakarta Post'.

   Entre los trasladados se encuentran, además del brasileño, otros extranjeros como los ciudadanos australianos Andrew Chan y Myuran Sukumaran, condenados en 2005 como cabecillas de una red de tráfico de heroína en Indonesia conocida como 'Los Nueve de Bali'.

   Por el momento no hay una fecha establecida para las ejecuciones, que se llevarán a cabo por un pelotón de fusilamiento, si bien el fiscal general de Indonesia, M. Pratseyo, ha dicho que las mismas son "inminentes".

   "Estableceremos la fecha de las ejecuciones tras el traslado de los condenados. Tendremos un especial cuidado durante todas las fases de la ejecución", ha afirmado, tal y como ha recogido la agencia estatal indonesia de noticias, Antara.

   Asimismo, Pratseyo ha desmentido que se vaya a posponer la ejecución del ciudadano brasileño Rodrigo Gularte después de que sus abogados alegaran una enfermedad mental, resaltando que la ley sólo exime a niños y embarazadas.

   Este caso es el último de una serie de sentencias de muerte impuestas a traficantes de drogas, incluidos ciudadanos extranjeros. Entre los condenados a muerte hay también ciudadanos de Francia, Ghana, Indonesia, Nigeria y Filipinas, según ha confirmado un portavoz de la oficina del fiscal.

EL CASO DE GULARTE

     El surfista brasileño Rodrigo Gularte, de 42 años, y originario de Paraná, fue detenido en 2004 en Indonesia junto con otros dos paranenses, tras arribar a Yakarta.

   Todos ellos fueron arrestados con ocho tablas de surf en las que transportaban seis kilos de cocaína, pero Rodrigo se hizo responsable del delito y un año después fue condenado a la pena de muertecuya ejecución estaba fijada en principio para este pasado mes de febrero.

      Si bien las coincidencias entre Archer y Gularte saltan a la vista (ambos eran deportistas, brasileños, y los dos fueron arrestados por el delito de tráfico de drogas en Indonesia, con un año de diferencia), la diferencia es que éste último padece de esquizofrenia, según ha alegado la familia, que se aferra a esta circunstancia para pedir clemencia.

     El caso de estos dos ciudadanos brasileños ha tensado las relaciones entre Brasil e Indonesia. Así, la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, se ha negado a recibir las credenciales del embajador indonesio en el país, Toto Riyanto.