BUENOS AIRES (Reuters/EP) - La actividad industrial argentina cayó un 1,7 por ciento interanual en mayo, dijo el miércoles el Gobierno, en el quinto mes consecutivo de retroceso y golpeada nuevamente por el derrumbe de la producción de vehículos y de acero crudo.
El indicador que mide la producción fabril mostró además una baja del 0,2 por ciento respecto de abril, para acumular en los primeros cinco meses del año una caída del 1,8 por ciento.
Analistas consultados por Reuters esperaban en promedio que el Gobierno informara una baja del 0,4 por ciento interanual en la actividad industrial de mayo.
El Gobierno reportó el martes que el PIB creció un 2,0 por ciento en los primeros cuatro meses del 2009.
El retroceso en la actividad industrial durante mayo muestra una aceleración frente a la caída del 1,4 por ciento interanual de abril, del 0,2 por ciento de marzo y el 1,1 por ciento de febrero, aunque es menor a la baja de 4,3 por ciento que había registrado en enero.
Las cifras oficiales difieren de las estadísticas privadas, que muestran una contracción más pronunciada de la actividad industrial en el país.
La consultora Orlando Ferreres y Asociados dijo recientemente que según sus sondeos, la industria cayó un 8,6 por ciento interanual en mayo y acumuló una baja del 8,5 por ciento en los primeros cinco meses.
Para la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL), que aún no difundió su estimación de mayo, la industria cayó un 12,5 por ciento interanual en abril.
SECTORES
Según las cifras oficiales, el sector de "Industrias metálicas básicas" cayó un 35,2 por ciento en mayo ante una baja del 44,1 por ciento del subrubro acero crudo, mientras que la industria automotriz perdió un 20,7 por ciento y la textil retrocedió un 12,2 por ciento.
Entre las mejoras se destacaron el sector de "sustancias y productos químicos" con el 12,7 por ciento de alza interanual, la industria alimenticia con mejora del 11,0 por ciento y el rubro "productos de caucho y plástico" con el 10,1 por ciento.
La economía argentina comenzó a desacelerarse a finales del 2008 por problemas domésticos y la crisis internacional, luego de seis años de vigorosa expansión.
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