Publicado 11/10/2019 10:58

Irak.- La depresión y los intentos de suicidio se extienden entre la población yazidí de Sinyar (Irak)

Irak.- La depresión y los intentos de suicidio se extienden entre la población y
Irak.- La depresión y los intentos de suicidio se extienden entre la población y - MSF/ EMILIENNE MALFATTO - Archivo

MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -

La dura situación por la que atraviesa la población yazidí del distrito de Sinyar, en el noroeste de Irak, ha derivado en una "acuciante crisis de salud mental" que se ha traducido ya en más de una veintena de intentos de suicidio solo entre abril y agosto, ha denunciado este viernes Médicos Sin Fronteras (MSF).

La ONG ha realizado un sondeo entre la población del pueblo de Sinuni, donde se encuentra una buena parte de la minoría yazidí, víctima de un genocidio a manos del grupo terrorista Estado Islámico en 2014 que conllevó también situaciones de abuso y esclavitud. En un cien por cien de los hogares hay al menos un miembro con alguna enfermedad mental.

MSF ofrece consultas de salud mental en esta zona desde diciembre y, en este tiempo, 286 personas se han inscrito en el programa, de las cuales 200 siguen bajo tratamiento. Cuatro de cada diez presentan un cuadro de depresión, mientras que un 18 por ciento muestra trastorno de conversión y un 17 por ciento ansiedad.

Entre abril y agosto, 24 personas ha ingresado de urgencia en el hospital de Sinuni por un intento de suicidio, un 46 por ciento de ellas menores de 18 años --una niña de 13 años falleció tras un ahorcamiento--. Además de esta menor, otros cinco pacientes murieron de camino al hospital o en el propio centro.

MSF ha pedido un aumento de la inversión en programas de atención de salud mental para ayudar a la población iraquí a superar las secuelas de las guerras y la inestabilidad que arrastran desde hace décadas. El coordinador general de la ONG en el país, Marc Forget, ha asegurado que el propio director médico del hospital de Sinyar les trasladó que "todos los habitantes del distrito, incluido él mismo, necesitarían poder acceder a servicios especializados en salud mental".

"Coincidió con nosotros en nuestras apreciaciones iniciales y nos advirtió de que nos enfrentábamos a una crisis de enormes proporciones. También nos comentó que esta crisis contaba con un elemento especifico y diferenciador, y que este elemento se encuentra directamente relacionado con el trauma colectivo que los yazidíes han padecido recientemente", ha añadido.

TRAUMAS QUE SE ARRASTRAN

El retorno de los desplazados es lento, entre otras razones porque muchos hogares han quedado reducidos a cenizas, las áreas donde vivían están llenas de mina o no hay un mínimo de servicios básicos.

Una médica del servicio de urgencias de Sinuni, Kate Goulding, ha contado que "aquí todo el mundo ha perdido al menos a un miembro de la familia o a un amigo", lo que deja una "abrumadora sensación de desesperanza y de pérdida" que se extiende por toda la región.

"La muerte de tu esposo, la enfermedad de un hijo, la ruptura de una pareja o la lejanía de la familia provocan sentimientos de tristeza que son universales, pero el alcance que tiene la pérdida para los miembros de esta comunidad es algo que resulta incomprensible para la mayoría de nosotros", ha aseverado.

Así, ha recordado que los yazidíes "han sufrido episodios de violencia extrema y de humillación, se han visto sometidos a desplazamientos forzosos desde hace décadas y viven sumidos en la pobreza y en el abandono por parte de la comunidad internacional". "Como dicen todos aquí, los genocidios y los asesinatos en masa perpetrados por Estado Islámico no fueron el primer genocidio al que sobrevivieron los yazidíes; antes de 2014, aseguran, hubo 73 matanzas más", ha añadido.

Goulding ha citado como "necesidad más acuciante" la contratación de personal cualificado, "especialmente a las áreas rurales y a las zonas del país afectadas por conflictos armados". MSF ha avisado de que la dependencia de trabajadores extranjeros no es sostenible a medio plazo.