MADRID, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
La representante especial de la ONU para Irak, Jeanine Hennis-Plasshchaert, ha hecho un nuevo llamamiento a que se atiendan las demandas y las reformas que desde hace cuatro meses los iraquíes reclaman en las calles y ha animado a quienes se manifiestan a que sigan haciéndolo de forma pacífica.
"En los últimos meses, cientos de miles de iraquíes de todos los estratos se han echado a las calles para expresar su esperanza de tiempos mejores, libres de corrupción, intereses partidistas e injerencia exterior", ha señalado la responsable de la ONU en un comunicado. "Las muertes y heridas de manifestantes, junto con largos años de promesas sin cumplir, han tenido como resultado una gran crisis de confianza", ha subrayado.
Hennis-Plasshchaert ha lamentado que dos meses después de que el primer ministro, Adel Abdul Mahdi, presentara su renuncia, los líderes políticos siguen sin haberle encontrado un sustituto y aunque todos reconocen que hacen falta reformas, ha llegado el momento de que las palabras se conviertan en hechos con el fin de evitar que las manifestaciones puedan ser manipuladas por quienes no quieren bien a Irak.
"Cualquier paso dado hasta ahora para abordar las preocupaciones de la población será hueco si no se completa. Hacen falta con urgencia unidad interna, cohesión y determinación para generar resiliencia frente a los intereses partidistas estrechos de miras, la injerencia extranjera y/o los elementos criminales que buscan activamente lastrar la estabilidad de Irak", ha prevenido.
La representante de la ONU ha reconocido que los últimos acontecimientos en la región, con la muerte del general iraní Qasem Soleimani en un ataque estadounidense en Bagdad, han desviado la atención de las cuestiones internas en Irak pero, según ella, esto no debería "eclipsar" las reivindicaciones legítimas de los iraquíes, ya que de lo contrario generaría más malestar y desconfianza.
Así las cosas, ha pedido a las autoridades iraquíes que hagan todo lo posible para proteger a los manifestantes pacíficos. "La supresión de manifestantes pacíficos es intolerable y debe evitarse a toda costa", ha reclamado.
"No hay nada más dañino que un clima de miedo. La rendición de cuentas y la justicia para las víctimas es crítica para forjar confianza, legitimidad y resiliencia", ha añadido, animando a los manifestantes a seguir formulando sus reivindicaciones de forma pacífica, evitando la violencia y la destrucción de propiedades.