MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ex alcalde metropolitano de Caracas Antonio Ledezma ha urgido este martes al "presidente encargado" de Venezuela, Juan Guaidó, a invocar el principio de intervención humanitaria para zanjar la crisis en la nación caribeña.
Ledezma ha denunciado, en un coloquio organizado por la Sociedad de Estudios Internacionales (SEI) en Madrid, la "catástrofe humanitaria" que sufre Venezuela a causa, según ha explicado, de la mala gestión económica del Gobierno de Nicolás Maduro.
El ex regidor local ha lamentado que "Venezuela pasó de ser un Estado petrolero a un Estado cocalero". De acuerdo con Ledezma, la producción petrolera ha caído desde los 3,5 millones de barriles de crudo a los actuales 700.000. En cambio, "el año pasado (...) salieron de Colombia 240 toneladas de cocaína que aprovecharon el territorio nacional", ha añadido.
En su opinión, si Maduro sigue en el cargo, tres meses después de que Guaidó se autoproclamara mandatario interino, es por esta "mafia". "Un barril de petróleo se lo pagan a Venezuela a 56 dólares y producirlo supera los 30. Un kilo de cocaína colocado en Estados Unidos se cotiza a entre 30.000 y 40.000 dólares ¿ven ustedes la diferencia?", ha planteado.
Para el antiguo alcalde capitalino, esto "confirma que Venezuela tiene un Estado forajido". "Y para enfrentar un Estado forajido se requiere activar el concepto de responsabilidad de proteger" acuñado por la ONU en 2005 para primar los Derechos Humanos sobre los principios de soberanía y no intervención en los asuntos internos, ha sostenido.
"Es momento de invocar el principio de intervención humanitaria para rescatar a Venezuela y evitar que, definitivamente, se convierta en una plataforma al servicio de estos oscuros proyectos que tienen que ver con el mal llamado concepto del socialismo del siglo XXI", ha instado.
CRISIS VENEZOLANA
La crisis en Venezuela se agravó el pasado 10 de enero por la decisión de Maduro de iniciar un segundo mandato que no reconocen ni la oposición ni gran parte de la comunidad internacional por considerar que las elecciones presidenciales del 20 de mayo fueron un fraude.
El 23 de enero, Guaidó se autoproclamó "presidente encargado" de Venezuela obteniendo el reconocimiento de buena parte de la comunidad internacional, incluidos Estados Unidos, la mayoría de países latinoamericanos y numerosos europeos, para que gestione una transición pacífica que culmine con nuevas elecciones.
Tres meses después del órdago de Guaidó, el proceso de cambio que auguraba se ha estancado. El líder opositor ha pedido a las Fuerzas Armadas venezolanas que dejen caer al Gobierno de Maduro, si bien solo ha conseguido algunas deserciones.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha reiterado que "todas las opciones", incluida la intervención militar, "están sobre la mesa". Los países de la región, que salvo algunas excepciones se han posicionado junto a Guaidó, rechazan esta vía.