BRUSELAS, 19 May. (EUROPA PRESS) -
El Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, transmitió al líder del Gobierno libio reconocido internacionalmente, Fayez Serraj, su preocupación por la ofensiva de las fuerzas rebeldes de Jalifa Haftar en Tripoli, que en las últimas semanas ha provocado muertes civiles en ataques indiscriminados contra zonas residenciales.
Según ha informado la oficina del Alto Representante, este lunes ambos dirigentes mantuvieron una conversación telefónica en la que abordaron el recrudecimiento de la violencia en Libia, ante la insistencia de Serraj de que la UE denuncie la ofensiva de Haftar. "El Alto Representante expresó su preocupación por la escalada en torno a Tripoli y el aumento de bombardeos sobre zonas residenciales densamente pobladas que han provocado bajas y el deterioro de la situación humanitaria", ha señalado un comunicado.
Borrell puso en valor la disposición del Gobierno de Serraj a participar en el Proceso de Berlín y reiteró la necesidad de que los actores involucrados en el conflicto cesen las hostilidades, pacten un alto el fuego y retomen las negociaciones políticas para una salida acordada. De esta forma, la UE recalcó su apuesta por seguir los esfuerzos de la conferencia internacional que congregó en la capital alemana a las principales partes y sus aliados a finales de enero, en una cita en la que se acordó una hoja de ruta que se ha venido incumpliendo por ambas partes.
Según la agencia estatal turca Anadolu, el líder libio mostró su malestar por la falta de un pronunciamiento concreto de la UE sobre lo que, a su juicio, son crímenes de guerra por parte de Haftar. "Le transmitió a Borrell que no estaba satisfecho con la UE por no adoptar una postura más precisa y efectiva sobre el asunto", señaló en un comunicado el Gobierno de unidad libio.
Desde principios de mayo se ha desatado la violencia en las afueras de Trípoli, con ataques de las fuerzas rebeldes que han golpeado zonas residenciales, hospitales e incluso instalaciones para refugiados. El pasado fin de semana siete personas murieron y otras nueve resultaron heridas por un bombardeo contra un refugio de desplazados en Tripoli.
La semana pasada 14 personas resultaron heridas en un ataque que tenía como objetivo un hospital y zonas residenciales y se suma al bombardeo a principios de mes que mató a cinco personas en un barrio de la capital y causó daños cerca de la embajada de Italia en Libia.
OPERACIÓN 'IRINI'
Asimismo, el responsable de la diplomacia de la UE ha defendido ante Serraj que la nueva operación militar de la UE en el Mediterráneo centrada en controlar el embargo de armas en Libia, decretado por la ONU, es una contribución europea para "recuperar la estabilidad en Libia" y una expresión concreta del compromiso con el Proceso de Berlín.
La misión 'Irini' fue criticada abiertamente por el Gobierno reconocido internacionalmente, que cuestiona su diseño porque considera que beneficia al bando rebelde. Desde Trípoli alegan que aliados de Haftar como Egipto y Rusia hacen llegar suministros por la frontera terrestre, mientras que la vía marítima es la que usa principalmente Turquía, que apoya al Ejecutivo que lidera Serraj, lo que provocaría una ayuda indirecta a este último.
Borrell insistió en que la misión frente a las costas libias está en línea con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y garantizará la aplicación efectiva del embargo, también por las fronteras terrestres y aéreas, puesto que cuenta con tecnología aérea y satélite.