TRÍPOLI, 27 Ago. (DPA/EP) -
El Gobierno de unidad de Libia, respaldado por Naciones Unidas y con sede en Trípoli, ha acusado este jueves a las fuerzas militares lideradas por Jalifa Haftar de violar el alto el fuego anunciado hace una semana y ha advertido de que responderá a cualquier amenaza.
El primer ministro, Fayez Serraj, anunció el viernes de la semana pasada un alto el fuego inmediato y el cese de todas las hostilidades con las autoridades que controlan el este del país, que respondieron a su vez con una medida recíproca. Sin embargo, el Ejército Nacional Libio (ENL) de Haftar se desmarcó de este compromiso.
Las fuerzas de Haftar acusaron a los combatientes leales al Gobierno de Serraj de preparar una ofensiva contra las ciudades de Sirte y Al Jufra. Un portavoz militar del Ejecutivo de unidad, Mohamed Gnounou, ha denunciado este jueves que las tropas del ENL habían lanzado de madrugada doce cohetes contra puestos situados al oeste de Sirte.
"El Mando de Operaciones espera instrucciones del comandante supremo para responder al origen de los disparos en el lugar y el momento adecuados", ha dicho Gnounou en un comunicado. El portavoz ha subrayado que Haftar no puede ser un socio fiable y se ha mostrado partidario de recuperar las localidades "secuestradas".