Actualizado 08/04/2019 10:28

Lula emite una carta tras cumplir un año en prisión: "Soy preso político exiliado dentro de mi propio país"

El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva
REUTERS / REUTERS PHOTOGRAPHER - Archivo

   BRASILIA, 8 Abr. (Notimérica) -

   El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, envió una carta a sus seguidores tras cumplirse este domingo un año de su detención y encarcelamiento en la sede de la Policía Federal en Curitiba, estado de Paraná, donde permanece confinado bajo el llamado régimen cerrado.

   En la misiva, publicada por el diario brasileño 'Folha de S. Paulo' en su página web, Lula no solo denuncia que sus demandantes "jamás presentaron una sola prueba contra mí", sino que además se encuentra en calidad de "preso político, exiliado dentro de su propio país", y que está "separado del pueblo brasileño, de mis familiares y de los amigos más queridos" con prohibición de "dar entrevistas, hablar y ser oído".

   En el texto, el exmandatario señala que puede "dormir con la conciencia tranquila" de su inocencia. "Nada han encontrado para incriminarme: ni conversaciones de bandidos, ni maletas de dinero, ni cuentas en el exterior", indicó Lula.

   El expresidente, que gobernó dos veces Brasil y dejó el cargo con un nivel de popularidad del 80%, fue condenado en 2017 por corrupción pasiva y lavado de dinero por el juez Sérgio Moro, actual ministro de Justicia del presidente Jair Bolsonaro. Un tribunal superior confirmó la pena y la amplió de nueve a 12 años y un mes de prisión.

   Moro señaló que la constructora OAS, con contratos con la petrolera estatal Petrobras, pagó al exmandatario con un tríplex (apartamento) en el balneario de Guarujá, estado de Sao Paulo. Lula asegura que la propiedad no es suya.

   En el escrito de este domingo, Lula recordó que nunca encontraron "ninguna conexión entre el apartamento que nunca fue mío y supuestos desvíos de Petrobras"; a pesar de eso, mencionó que el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil le negó "una justa petición de habeas corpus".

   En febrero pasado, Lula recibió otra condena, de 12 años y 11 meses de prisión, también por corrupción. En esta oportunidad, el fallo fue por la investigación sobre el pago de sobornos para la reforma de una casa de fin de semana en Atibaia, que fue financiada por las constructoras OAS, Odebrecht y Schahin; la justicia determinó que el exmandatario recibió un millón de reales (unos 270.000 dólares) por las reformas del inmueble.

   El exmandatario acusa que su único crimen, por el que se encuentra preso, es "dedicar una vida entera a la construcción de un Brasil más justo, desarrollado y soberano".

   Asimismo, el expresidente de Brasil afirma que su candidatura presidencial para participar en los comicios de 2018 fue impedida debido a su popularidad. Lula era el candidato favorito en todas las encuestas ante el posible escenario electoral.

   "Pensaban que la imposición de ese largo silencio callaría para siempre mi voz. Pero no la callaron ni la callarán, porque somos millones de voces", afirmó el líder popular, agregando que "estamos vivos y fuertes. Juntos, vamos a revertir cada retroceso, cada paso atrás en la dura caminata hacia el Brasil que soñamos y que probamos ser posible construir. Venceremos".