Publicado 20/05/2016 19:36

Lula se presentaría a las elecciones de 2018 "para no perder logros sociales en Brasil"

Brazil's former president Inacio Lula da Silva gestures during the event
SERGIO MORAES / REUTERS

   BRASILIA, 20 May. (Notimérica) -

   El ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva se ha pronunciado tras la destitución de su sucesora, Dilma Rousseff, el pasado 12 de mayo, en una entrevista para Telesur, donde ha señalado que la exmandataria está suspendida "por un capricho político".

   Lula ha afirmado que el hecho de que Temer gobierne como si hubiera sido electo por la mayoría del pueblo "está fuera de lugar" y que sería el candidato en las elecciones de 2018 "para evitar que se destruyan los logros sociales de Brasil".

   El exjefe de Estado ha señalado que durante los últimos 12 años, los gobiernos del Partido de los Trabajadores (PT) "han logrado sacar de la pobreza extrema a 30 millones de personas", además de haber realizado mejoras en relación a la situación de los estudiantes universitarios.

   El político brasileño también tuvo algunas palabras hacia el actual presidente, Michel Temer, del que afirmó que "solo es interino, debe quedar claro que Dilma solo está suspendida por un capricho político".

   El expresidente se refirió a su sucesora como una persona que "convenció a 54 millones de brasileños", mientras que no consiguió convencer a "solo seis senadores". "Ellos no querrán ser recordados como los senadores que inhabilitaron a una mujer inocente y víctima de una campaña sucia", ha puntualizado el político.

LA PRENSA COMO CÓMPLICE

   Para Lula, la prensa local jugó un papel importante en el proceso de 'impeachment' --juicio político-- contra Rousseff. "La prensa brasileña lo sabe: ellos han sido los responsables de este golpe, todos estaban en contra de Rousseff", ha declarado el exmandatario.

   El líder del Partido de los Trabajadores (PT) ha afirmado también que la elite política y cultural del gigante americano siempre se ha mostrado "muy sumisa con Europa y Estados Unidos (...), mientras que debería combatir contra ellos".

   Lula también ha destacado el apoyo institucional de algunos líderes internacionales "tras el golpe de estado de la derecha brasileña". "Hacemos política porque creemos que siempre es posible hacer algo más por un país libre y democrático", ha señalado el exjefe de Estado.

   El Senado de Brasil aprobó el 'impeachment' contra Dilma Rousseff el pasado 12 de mayo con 55 votos a favor, 22 en contra y 1 abstención (de 78 de los 81 miembros), provocando la destitución de Rousseff durante un período máximo de 180 días.