CARACAS, 12 Feb. (Notimérica) -
El presidente venezolano Nicolás Maduro ha afirmado que "El Ku Kux Klan que hoy gobierna la Casa Blanca quiere apoderarse de Venezuela", en referencia al Gobierno estadounidense encabezado por Donald Trump, al que acusa de supremacista blanco "pública y abiertamente".
El mandatario del país caribeño ha llamado a su pueblo a resistir las presiones del exterior, negándose nuevamente a convocar elecciones y a permitir la llegada de ayuda humanitaria reclamada por el autoproclamado presidente "encargado", Juan Guaidó, en una entrevista con 'BBC'.
Al resto de países de la región que coinciden con la postura norteamericana, Chile, Colombia o Argentina, entre otros, les acusa de haber conformado "un cuadro de Gobiernos de extrema derecha que han sustituido la política internacional de respeto, de tolerancia".
"Venezuela no es un país de hambruna. En Occidente se desfigura la situación en Venezuela para justificar cualquier intervención", ha argumentado Maduro para defender su postura frente al envío de alimentos y medicinas para la población por parte de países como Estados Unidos y Colombia.
Asimismo, se ampara en las cifras para referirse a la crisis humanitaria que atraviesa el pueblo venezolano. "Tenemos un 4,4 por ciento de pobreza extrema, claro que queda por superar. Pero venimos de un 25 por ciento y hemos reducido todos los índices de desigualdad. Tenemos índices reconocidos por los organismos internacionales del mayor nivel en la igualdad de la inversión social", afirma Maduro.
El mandatario acusa al Gobierno de Trump de arrebatarles recursos económicos para provocar "un show barato, de indignidad y humillación" y a los medios occidentales de exagerar la campaña de migración venezolana.
"El nivel educativo de los que se fueron es alto, se ha ido mano de obra calificada. Buscando alternativas en el exterior se encontraron con situaciones peores. Ten la seguridad de que la mayoría de los que se marcharon van a regresar. Venezuela tiene los problemas que pueda tener cualquier país del sur, del tercer mundo, de América Latina", ha señalado Maduro.
Respecto a la sanidad, el presidente venezolano ha afirmado que están haciendo un gran esfuerzo y ha defendido su sistema primario de medición de medicinas, como ha denominado, "único en el mundo".
"En mayo gané con el 68 por ciento de los votos las presidenciales. Desde entonces, el Gobierno de Estados Unidos hizo una política de boicot a las elecciones, porque sabían que ningún candidato de la oposición nos iba a ganar una elección", ha respondido Maduro a la petición de que convoque elecciones.
Maduro ha afirmado que el Ejército estaría preparado para defender los derechos de Venezuela si se produjese una intervención y ha negado las muertes a manos de las fuerzas de seguridad denunciadas por la Organización de Naciones Unidas (ONU) en las protestas que han tenido lugar en las últimas semanas.
"El mandato que me dieron es muy poderoso y yo tengo que cumplirlo. Lo he jurado con mi vida misma. Juré ante el Tribunal Supremo dar mi vida por cumplir y hacer cumplir la Constitución y lo voy hacer más allá de lo que se pueda decir y hacer", ha puntualizado Maduro preguntado sobre si estaría dispuesto a dejar el poder.