MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
La rama de Al Qaeda en Malí ha reclamado este viernes el ataque ejecutado el lunes en el norte del país, que se saldó con la muerte de 25 militares, y ha pedido a Francia que haga "como España" y "retire" sus tropas del país.
El Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM) ha indicado en un comunicado que perpetró un ataque con morteros contra una base militar en Bamba antes de iniciar el asalto por tierra desde dos frentes.
"Gracias a Dios, el enemigo fue rodeado desde tres ejes y fue derribado, tras lo que se irrumpió en los barracones", ha dicho, antes de afirmar que "eliminó" a 30 soldados.
Asimismo, ha vuelto a pedir al "corrupto" Gobierno de Malí que rompa su alianza con Francia e inicie unas conversaciones de paz con el grupo yihadista para poner fin al conflicto en el país africano.
En este sentido, ha citado concretamente a Francia como "actor principal" en el conflicto y ha destacado que debería retirar a sus tropas "como su vecino España, que ha anunciado su intención" de hacerlo por "estar exhausto a causa de la epidemia de coronavirus".
El JNIM ha resaltado que "la península Ibérica es la tierra de Andalucía, que Dios restaurará a los musulmanes", y ha manifestado que la pandemia podría provocar "la desintegración de esta alianza diabólica".
"Si Dios quiere, Francia considerará sus pérdidas a causa del castigo divino (en referencia al coronavirus) y se retirará como España retiró a sus soldados", ha remachado.
La rama de Al Qaeda en Malí parece hacer referencia así a la decisión de la Unión Europea (UE) de suspender temporalmente la misión de entrenamiento a las fuerzas de seguridad de Malí, en la que participan alrededor de 300 militares españoles desde el año 2013 para ayudar a la estabilización del país.
Como consecuencia de la crisis generada por el Covid-19, la operación EUTM-Malí se encuentra suspendida desde la pasada semana debido a la imposibilidad de garantizar las medidas sanitarias recomendadas por las autoridades y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Malí ha venido registrando en los últimos meses un número creciente de ataques yihadistas obra tanto de la filial de Al Qaeda en la región como de la de Estado Islámico, lo cual ha hecho además aumentar la violencia intercomunitaria y provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas.