Actualizado 22/07/2009 23:46

Maliki se reunirá con Obama, busca inversión en Irak

Por Ross Colvin

WASHINGTON (Reuters/EP) - El primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki, se reunirá el miércoles con el presidente Barack Obama en una visita que apunta a reafirmar la soberanía de Irak e incentivar a inversionistas extranjeros a volver al país arrasado por la guerra.

Tres semanas luego de que las tropas estadounidenses se retiraron de pueblos y ciudades iraquíes, preparando el camino para un retiro completo a fines del 2011, tanto Washington como Bagdad están ansiosos por mostrar que su relación ha entrado en una nueva fase, con más énfasis en la cooperación no militar.

Maliki también usará la visita de una semana a Estados Unidos para pedir que se levanten las medidas de Naciones Unidas que obligan a Irak a pagar miles de millones de dólares a Kuwait en reparaciones de guerra por la invasión de 1990.

El primer ministro instó a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU -Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Gran Bretaña- a rechazar las medidas el miércoles en Nueva York.

El Gobierno liderado por chiítas de Maliki depende de las regalías petroleras y tuvo que recortar planes de gastos tres veces este año debido a la fuerte caída de los precios del petróleo desde el verano pasado.

Por eso está agresivamente intentando atraer a inversionistas extranjeros mientras lucha por revivir una economía estancada por décadas de sanciones, negligencia y guerra.

En su visita, Maliki presentará la mejorada seguridad de Irak tras seis años de conflicto que dejaron a miles de muertos en violencia insurgente y sectaria y obligaron a millones de personas a abandonar sus hogares.

Pero los inversionistas siguen inseguros de si el marco legal y regulatorio de Irak les ofrecerá protección suficiente, y aunque la violencia ha caído fuertemente, grandes ataques con bomba todavía son comunes.

Cinco peregrinos iraníes murieron en Irak el miércoles cuando hombres armados atacaron un convoy de ómnibus.

Irak también se ha visto afectado por profundas divisiones entre la mayoría chiíta, los sunitas y los kurdos. El Gobierno de Obama está preocupado por el lento ritmo de la reconciliación política, una prioridad para Estados Unidos.

CRECIENTE DIVISION ENTRE KURDOS Y ARABES

También hay inquietud por las crecientes tensiones entre el territorio semi autónomo de Kurdistán y Bagdad, que según los analistas pueden desatar un renovado conflicto mientras el país se recupera después de años de violencia sectaria.

Los kurdos quieren incorporar la disputada ciudad de Kirkuk, que las autoridades estadounidenses creen que podría contener hasta el 4 por ciento de las reservas mundiales de petróleo, a su región del norte, pero el Gobierno de Maliki se opone tajantemente.

"Maliki va a pedir a Estados Unidos que incremente su presión al Gobierno kurdo. Hallar una solución para este tema es vital y no puede postergarse más tiempo", dijo Saad al-Hadithi, analista político de la Universidad de Bagdad.

Más de 4.300 soldados estadounidenses han muerto en Irak desde la invasión liderada por Estados Unidos en el 2003 que derrocó a Saddam Hussein. Aún hay 130.000 soldados estadounidenses en el país.