Actualizado 21/04/2015 22:56

La mejora de relaciones marca la visita del canciller cubano a Francia

MADRID, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -

   Los gobiernos de Francia y Cuba han coincidido este martes en el interés de ambas partes por estrechar las relaciones bilaterales con motivo de la visita a París del canciller cubano, Bruno Rodríguez, que se ha visto con el presidente galo, François Hollande, y el ministro de Exteriores, Laurent Fabius.

   El jefe de la diplomacia gala realizó en abril de 2014 una histórica visita a Cuba, la primera en tres décadas de un alto cargo francés. Hollande viajará a la isla el próximo 11 de mayo para reafirmar este acercamiento, que coincide también con un mayor aperturismo de la UE.

   Rodríguez ha correspondido este interés con una visita oficial a París en la que, por la mañana, ha mantenido una "constructiva" reunión con Hollande en Elíseo, según la prensa cubana. Ambos manifestaron una "voluntad mutua" para estrechar lazos.

   Estos gestos de acercamiento también se han repetido, ya por la tarde, en el encuentro entre el canciller cubano y su homólogo francés. Ambos han ofrecido una rueda de prensa durante la que han repasado los ámbitos en los que pueden expandir relaciones.

   Rodríguez ha destacado que la próxima visita de Hollande a la isla será importante no sólo para Cuba, sino también para la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que se verán como "prioridad" de la política exterior francesas en sus relaciones con América Latina.

   Fabius, por su parte, ha reiterado su condena al bloqueo impuesto por Estados Unidos sobre la isla desde hace más de medio siglo. En este sentido, ha recordado que su país siempre se ha opuesto a esta medida y ha instado a Washington a levantarla, según medios oficiales cubanos.

   Tras su escala en París, Rodríguez recalará en Bruselas, donde será recibido este miércoles por la Alta Representante de Política Exterior de la UE, Federica Mogherini. Ese encuentro forma parte de los contactos de alto nivel en marcha para acelerar las negociaciones con las que La Habana y el bloque comunitario pretenden normalizar las relaciones bilaterales.