Actualizado 16/08/2011 22:47

México.- El Congreso descarta abrir un periodo extraordinario de sesiones para debatir propuestas pendientes de Calderón

El Presidente De México, Felipe Calderón.
EUROPA PRESS/PRESIDENCIA DE MÉXICO


MÉXICO DF, 16 Ago. (Reuters/EP) -

El Congreso de México ha descartado llevar adelante la propuesta del presidente Felipe Calderón de convocar un periodo extraordinario de sesiones para debatir algunas reformas que han quedado pendientes, en medio de duras pugnas electorales entre los partidos.

Calderón pidió en junio al Congreso realizar sesiones ordinarias en agosto --mes de receso para los diputados-- al ver que se apaga la posibilidad de que avancen los proyectos planteados cuando comenzó su mandato en 2006 para un periodo de seis años que culminará en diciembre del año próximo.

Pero los partidos están enfocados desde ahora en las elecciones presidenciales de julio de 2012, mientras que varios políticos, entre ellos secretarios de Estado, se muestran muy activos buscando ser candidatos para suceder a Calderón.

"Definitivamente no habrá (periodo extraordinario)", informó a Reuters el diputado del gobernante Partido Acción Nacional (PAN), Luis Enrique Mercado, uno de los principales negociadores de reformas del Gobierno en el Congreso. "Los dictámenes no están terminados", agregó.

Mercado comentó también que ve difícil que las reformas pendientes sean aprobadas en el próximo periodo ordinario de sesiones en la Cámara de Diputados y el Senado --que comienza el 1 de septiembre hasta el 15 de diciembre-- debido a las tensiones entre partidos por la aprobación del presupuesto para 2012.

Entre las reformas que el mandatario quería que se aprobaran está una política, que propone candidaturas independientes y la reelección consecutiva de legisladores, y otra laboral, que busca facilitar el acceso a empleos mientras la economía aún se recupera de la severa recesión de 2009.

Otros proyectos son para apuntalar una ofensiva contra los cárteles de las drogas, como la que busca regular la participación de las fuerzas armadas en labores de seguridad interior, y otra para combatir el blanqueo de dinero.