CIUDAD DE MÉXICO, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, ha recibido numerosas críticas por la reunión que tiene prevista para este miércoles con el candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, pese a los comentarios racistas del magnate estadounidense sobre los inmigrantes mexicanos.
El encuentro en el Palacio de los Pinos --sede de la Presidencia de México-- estaba programada para las 14.30 (hora local), pero se ha retrasado a las 15.00, según ha informado el Partido Republicano, para que a Trump le dé tiempo a llegar desde California.
"Creo en el diálogo para promover los intereses de México en el mundo y, principalmente, para proteger a los mexicanos donde quiera que estén", ha esgrimido Peña Nieto en su cuenta oficial de Twitter, avanzando que también se entrevistará con la aspirante demócrata, Hillary Clinton.
Pero estas explicaciones han sido insuficientes. Políticos de la oposición, intelectuales y medios de comunicación han cargado contra Peña Nieto por invitar a México a alguien que ha llamado "criminales" y "delincuentes" a los inmigrantes mexicanos en Estados Unidos.
"¿En qué cabeza cabe invitar a Donald Trump? Los mexicanos tenemos memoria y dignidad. Trump no es bienvenido a México." ha dicho, a través de la misma red social, el presidente del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya.
El ex presidente mexicano Vicente Fox ha acusado a Peña Nieto de caer en la "trampa" de Trump. "Nos está chamaqueando. Lo está usando para sus viles propósitos de recuperar votos perdidos", ha advertido, indicando que "la única manera de salvar la cara" es que el líder republicano "pida perdón de rodillas".
En la misma línea se ha expresado el también opositor Partido de la Revolución Democrática (PRD) en un comunicado. "La entrevista privada que tendrá con Donald Trump no tiene ningún beneficio para nuestro país y sólo favorece las aspiraciones políticas de este demagogo y antimexicano", ha lamentado.
"Ya que se ha invitado a Trump a México, lo mínimo que se puede esperar es que ofrezca una disculpa pública por los insultos que ha lanzado en contra de los mexicanos llamándonos 'criminales'", ha pedido, por su parte, el historiador mexicano Enrique Krauze.
Desde Estados Unidos, la campaña demócrata ha recopilado todos los comentarios ofensivos que Trump ha dirigido a los mexicanos durante estos meses. "México no es nuestro amigo. Nos están matando en la frontera y están matando nuestros trabajos", dijo, proponiendo construir "una gran muralla" que pagara el país iberoamericano.
"Desde los primeros días de la campaña, Trump ha denominado a los mexicano 'violadores' y 'criminales' y ha prometido deportar a 16 millones de personas, incluyendo niños y ciudadanos estadounidenses", ha recordado el equipo de Clinton.
Tras entrevistarse con Peña Nieto, el candidato republicano se trasladará a Phoenix, Arizona, un estado fronterizo con México, para defender su política migratoria. "Lo importante es lo que le diga a los votantes en Arizona, no en México", han subrayado los demócratas.