MEXICO, 29 Ago. (EP/AP) -
Después de que el tribunal electoral anunciara el lunes que un recuento parcial de los comicios presidenciales no alteraría la leve ventaja del oficialista Felipe Calderón, el izquierdista Andrés Manuel López Obrador propuso a sus seguidores desconocer a su rival como mandatario y formar un Gobierno paralelo.
Pese a que el tribunal todavía no ha declarado a un presidente electo, López Obrador afirmó a sus partidarios que con los datos dados a conocer por el órgano judicial "se abre el camino a un usurpador que pretende ocupar la presidencia de la República mediante un golpe de estado".
Desde la principal plaza de la capital, el Zócalo, el izquierdista presentó un plan de acción para que sus seguidores lo discutan y en su caso lo aprueben durante una convención nacional democrática el 16 de septiembre, el cual incluye no reconocer al oficialista como mandatario.
"Se rechaza la usurpación y se desconoce al señor Felipe Calderón Hinojosa como presidente de la República, lo mismo que a los funcionarios que él designe, así como a todos los actos de su gobierno de facto", señaló el abanderado del Partido de la Revolución Democrática (PRD) ante cientos de simpatizantes que en medio de una lluvia manifestaban su apoyo a gritos.
"Nunca más aceptaremos que se instaure un gobierno ilegal e ilegítimo en nuestro país", añadió el izquierdista, que sostiene hubo un fraude en su contra. "Propongo que la convención nacional democrática resuelva... si constituimos un Gobierno de la República o una Coordinación de la Resistencia Civil Pacífica", dijo, y añadió que ello implicaría elegir, por ejemplo, "a un jefe de Gobierno en Resistencia".
El tribunal electoral dio a conocer los resultados del recuento en un comunicado emitido pocas horas después de pasar a receso una audiencia pública en la cual anunció la resolución de las 375 inconformidades sobre la elección del 2 de julio.
El órgano anunció que el número de los votos que anuló al resolver las impugnaciones redujo la ventaja de Calderón de 240.000 en poco más de 4.000 votos.
Sin embargo, los siete jueces del tribunal aplazaron el anuncio de la votación final así como su pronunciamiento sobre la petición del izquierdista para que anule toda la elección.
La corte tiene de plazo hasta el 6 de septiembre para declarar un presidente electo o anular los comicios.
El tribunal anuló más de 230.000 votos, incluidos 81.080 del gobernante Partido Acción Nacional, la mayor pérdida de cualquier partido en el recuento parcial.
La coalición de López Obrador, encabezada por el PRD, perdió 76.897 votos, y el resto de los sufragios anulados correspondió a partidos pequeños.
López Obrador impugnó parcialmente los resultados de la elección con el argumento de que la campaña estuvo manchada por irregularidades y que en los comicios hubo un fraude generalizado de modo que diera la ventaja a Calderón.
"El día de hoy el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación decidió convalidar el fraude a la voluntad ciudadana expresada en las urnas el dos de julio y respaldar a los delincuentes que nos robaron la elección presidencial", dijo el candidato del PRD.
Varios de los jueces defendieron su labor en la audiencia pública del lunes, insistiendo en que sólo pudieron anular votos cuando no estaba claro el destinatario del sufragio en las boletas y dijeron que cada inconformidad debió ser específica y respaldada con evidencias.
El presidente del tribunal, Leonel Castillo consideró imposible decir que "bueno, hubo irregularidades", en un aparente cuestionamiento a la estrategia de López Obrador de criticar el proceso electoral de manera general y exigir un recuento total. Los jueces rechazaron esa demanda del 5 de agosto al considerarla innecesaria e incluso ilegal.
En protesta a la elección, el izquierdista ha encabezado manifestaciones callejeras e instalado campamentos de protesta que han provocado caos vial. El domingo dijo que en la convención nacional democrática preguntará a sus simpatizantes si lo declaran presidente electo "alternativo" o líder de un movimiento nacional de resistencia.
El presidente Vicente Fox deja el cargo el 1 de diciembre. Los mandatarios mexicanos están limitados a una sola gestión de seis años.