Interior remite una carta a la Embajada en la que pide a Aznar la "estricta observancia" de las leyes mexicanas cuando esté en el país
MEXICO DF, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los principales partidos mexicanos, a excepción del oficialista Partido de Acción Nacional (PAN), acordaron anoche pedir al Gobierno de Vicente Fox que expulse del país al ex presidente del Ejecutivo español José María Aznar por violar las leyes mexicanas al expresar públicamente su apoyo al candidato presidencial del PAN, Felipe Calderón.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido del Trabajo (PT) firmaron un documento en el que instan al secretario de Gobernación, Carlos Abascal, a aplicar el artículo 33 de la Constitución y ordenar el abandono del territorio nacional a Aznar por inmiscuirse "en asuntos políticos que son propios y exclusivos de los mexicanos".
En este sentido, el diputado 'perredista' Rafael García reconoció que aunque eran conscientes de que Aznar ya había abandonado el país en el momento de plantear la expulsión del ex mandatario --cuestión que será debatida hoy en el pleno del Congreso--, su intención es "dejar sentado un precedente" para ocasiones venideras, según informa la prensa local.
Sin embargo, a pesar de la petición de expulsión impulsada por los coordinadores parlamentarios Pablo Gómez Álvarez, del PRD, Emilio Chuayffet Chemor, por el PRI, y Oscar González Yánez, por el PT, la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Marcela González Salas, consideró "excesivo" pedir al ex presidente Aznar que abandone el país.
"LLAMADA DE ATENCIÓN"
En este sentido, González Salas aseguró que bastaría con hacer una "llamada de atención y de apercibimiento" al ex presidente y, en caso de que Aznar cometiera nuevamente el "error de entrometerse" en asuntos políticos de México, el Gobierno mexicano podría ordenar su "expulsión inmediata del país".
Sin embargo, el vicepresidente de la Cámara, el priísta Heliodoro Díaz, advirtió de que si Aznar violó la Constitución se debería ordenar su expulsión inmediata al argumentar que, desde el punto de vista constitucional, el ex presidente se inmiscuyó en asuntos propios del país y, en consecuencia, debe ser expulsado.
"A ver si el Ejecutivo, que reacciona tan rabiosamente, como en el asunto del Hotel Sheraton o cualquier tipo de injerencia de otra gente u otros países en política nacional, a ver si aquí se pone las pilas y le pide al señor Aznar que se regrese a su país a tratar de reconquistar la voluntad de los suyos (...) Es un candidato perdedor, perdió las elecciones", añadió el priísta Miguel Lucero Palma.
CARTA A LA EMBAJADA
Por otro lado, la Secretaría de Gobernación remitió ayer una carta a la Embajada de España en México, firmada por el subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos, Lauro López Sánchez, en el que se pide al ex presidente Aznar la "estricta observancia de las leyes mexicanas cuando se encuentre en territorio nacional".
Asimismo, en otro oficio enviado al presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Acción Nacional (PAN), Manuel Espino, se le pide "advertir a los visitantes extranjeros que la Constitución de México dispone que no podrán de ninguna manera inmiscuirse en los asuntos políticos del país".
"En México respetamos y fomentamos nuestra profunda tradición respecto a la autodeterminación de los pueblos y la no intervención, como principios normativos de la conducción política de las naciones; lo anterior está claramente establecido en el Artículo 89 de la propia Constitución Política", apuntó la Segob.
"AVENTURAS Y DEMAGOGIA"
Aznar participó el martes en un hotel de la capital mexicana en el foro 'La fuerza de las ideas y el futuro de América Latina', organizado por la Fundación del PAN 'Rafael Preciado Hernández' y por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), que encabeza el ex presidente, según informa la prensa local.
Durante su intervención en la clausura del acto, Aznar se mostró partidario de que el PAN y su candidato, Felipe Calderón, gane las elecciones presidenciales que tendrán lugar el próximo 2 de julio y que, a su juicio, de esa forma los mexicanos opten por lo que llamó una "política estable y seria, en vez de la aventura y la demagogia".
El artículo 33 de la Constitución Política mexicana señala que "los extranjeros no podrán, de ninguna manera, inmiscuirse en asuntos políticos del país". Además, permite al Gobierno "hacer abandonar el territorio nacional, inmediatamente y sin necesidad de juicio previo, a todo extranjero cuya permanencia juzgue inconveniente".
Desde 1995, un año después del alzamiento zapatista encabezado por el subcomandante Marcos el 1 de enero de 1994, han sido expulsados de México numerosos ciudadanos extranjeros que se encontraban en el estado de Chiapas, al sur del país, en calidad de observadores y defensores de los Derechos