Actualizado 07/12/2012 05:46

México.- El único herido grave en las manifestaciones contra la investidura de Peña Nieto pierde un ojo


MÉXICO DF, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -

El único herido grave en los disturbios que se produjeron el pasado 1 de diciembre durante las numerosas manifestaciones que se celebraron en la capital mexicana contra la investidura presidencial de Enrique Peña Nieto ha perdido un ojo.

Uriel Sandoval, estudiante universitario de 22 años de edad, ha recibido este jueves el alta hospitalaria tras perder un ojo y sufrir varias fracturas en un pómulo y en la nariz a causa de las lesiones que le infligieron las fuerzas de seguridad.

Según su versión, una bala de goma lanzada por la Policía le dio en la cara, no obstante, tanto el cuerpo de seguridad como las autoridades capitalinas han asegurado que los agentes antidisturbios no utilizaron balas de goma para disolver la manifestación.

A su salida del Hospital General de México DF, Sandoval ha sido recibido por decenas de estudiantes universitarios que le han expresado su apoyo. "¡No estás solo!", han gritado, según ha informado el diario local 'La Jornada'.

Sandoval ha exigido la liberación de "todos los presos políticos", en alusión a las 106 personas que fueron detenidas en el marco de los disturbios, de las cuales 28 han sido liberadas --12 "bajo reserva de ley"-- y 69 han pasado a disposición judicial.

"Reivindico todas las formas de lucha, y pido justicia para todos los presos políticos, porque la libre manifestación es un derecho que no nos dejaremos arrebatar", ha dicho el estudiante universitario, en una breve rueda de prensa.

ABUSO DE LA FUERZA

Por su parte, la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos (Limedh) ha anunciado que ha presentado ante la Procuraduría General de la República (PGR) una denuncia penal contra los policías federales que dispararon balas de goma contra los manifestantes.

El presidente de la Limedh, Adrián Ramírez, ha subrayado que el Gobierno sabe que las balas de goma pueden llegar a ser mortales, al tiempo que ha recordado la muerte de dos personas a causa del uso de este material durante los disturbios de mayo de 2006 en San Salvador Atenco.

Amnistía Internacional (AI) ha urgido a las autoridades mexicanas a "investigar de forma imparcial y exhaustiva las denuncias y evidencias del uso excesivo de la fuerza contra manifestantes, periodistas y transeúntes durante los disturbios" y a "dar a conocer los resultados".

"Las autoridades tienen la obligación de controlar el orden público y tomar medidas para prevenir, investigar y sancionar a los responsables de los actos de violencia, pero estas medidas tienen que ser proporcionadas y apegadas a los Derechos Humanos", ha dicho en un comunicado.