MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior de Bolivia, Carlos Romero, ha alertado este miércoles de la posibilidad de que se produzca un ataque contra el Tribunal Supremo Electoral (TSE) con dinamita y ha acusado a los manifestantes de la Asociación de Productores de Coca (Adepcoca) de estar planeándolo.
"Hemos recibido en el curso de la tarde un informe de Inteligencia de la Policía boliviana que da cuenta de que grupos violentos se van a dirigir a la plaza Abaroa, en las inmediaciones de las instalaciones del Tribunal Supremo Electoral, con la finalidad de provocar daños al patrimonio público y fundamentalmente enfrentarse a la Policía con explosivos, instrumentos contundentes y dinamita que transportan en mochilas", ha expresado el ministro.
Según informaciones del diario local 'Página Siete', estudiantes de la Universidad Mayor de San Andrés, cuyo rector ha resultado heridos en el marco de las protestas desencadenadas a raíz de la interrupción de la transmisión de resultados preliminares por parte del TSE durante la noche electoral del domingo, también tienen previsto participar en el ataque.
Romero ha indicado que se trata de un grupo liderado por el secretario ejecutivo de Adepcoca, Franclin Gutiérrez, que habría salido del mercado de Villa Fátima portando dinamita.
"Las personas que están con dinamita, son personas que responden al grupo de Franclin Gutiérrez, por eso han salido munidos de dinamitas que trasladan en sus mochilas", ha manifestado.
Así, ha recalcado que grupos de jóvenes y otros sectores provocan y buscan confrontación con los uniformados, por lo que ha advertido de que ante actos de violencia la responsabilidad recaerá sobre aquellos que inciten este tipo de incidentes.
"Lo que vaya a acontecer en el escenario de la plaza Abaroa esta noche, será de responsabilidad política y jurídica de quienes están promoviendo estas movilizaciones violentas", ha afirmado. En dicha plaza se han registrado durante los últimos días disturbios entre los manifestantes y las fuerzas de seguridad, que han usado gas lacrimógeno y cañones de agua en un intento de dispersarlos.