Actualizado 26/06/2009 23:57

Mugabe dice Zimbabue podría revivir su propia moneda

Por Cris Chinaka

HARARE (Reuters/EP) - El presidente Robert Mugabe dijo que Zimbabue podría revivir el uso de su propia moneda, porque el dólar introducido para dominar la hiperinflación no estaba a disposición de la mayoría de las personas en el área rural.

Sus comentarios contradicen una promesa hecha a los inversores esta semana por parte del ministro de Planificación Económica, Elton Mangoma, de mantenerse con el dólar, y presenta dudas acerca de quién está a cargo de la política en Gobierno con poder fragmentado de Harare.

Según el diario estatal Herald, Mugabe dijo que el acuerdo del Gobierno con el rival Morgan Tsvangirai estaba luchando por aliviar la dificultad económica, pero que Zimbabue no podía tener un sistema donde la gente rural fuera obligada a comerciar su ganado.

"No podemos tener un país así. Estamos revisando el tema para que podamos volver al uso de nuestra propia moneda nacional", dijo en un mítin de su partido ZANU-PF, de acuerdo con el periódico.

En enero, Harare levantó una prohibición en el uso de moneda extranjera para detener la hiperinflación de más de 230 millones por ciento que habían hecho al dólar zimbabuense perder casi todo su valor.

La decisión llevó a una caída en los precios y a un flujo de bienes a los anteriormente estantes vacíos de los supermercados, pero Mugabe dijo que había causado sufrimiento porque las personas de las áreas rurales no tenían acceso a los dólares y a los rands sudafricanos que circulaban en los pueblos.

En el momento de la liberalización monetaria, los economistas predijeron que esto podría hacer la vida más difícil a los zimbabuenses comunes, la mayoría de los cuales seguiría recibiendo sus pagos en moneda local pero estarían obligados a pagar por los bienes y servicios en moneda extranjera.

Los contradictorios comentarios de Mugabe y Mangoma sugieren que la unidad administrativa formada en febrero para tratar de terminar con la devastadora crisis política y monetaria todavía se daba a nivel de políticas muy básicas.

Mugabe y Tsvangirai, ahora primer ministro, formaron una unidad de Gobierno en febrero, en un esfuerzo por terminar con una década de hostilidad política y una crisis económica.

Durante las últimas tres semanas, Tsvangirai ha estado en una gira por Estados Unidos y Europa para recaudar dinero de donantes. Tiene poco dinero que mostrar y ha estado bajo presión de persuadir a su socio de darle un impulso a la democracia y a los derechos humanos.

El Heral dijo que Mugabe había desestimado las acusaciones de Amnistía Internacional de que no habría podido frenar los abusos y que calificó a la secretaria general de la agencia, Irene Khan, de "una mujercita que parecía haber sido hechizada".

Mugabe también criticó lo que dice es un complot occidental para destruir a su partido.

"El único imperialista bueno es el muerto", dijo.